A pocos días de haber comenzado, casi no quedan dudas de que esta será una temporada difícil para muchos en Villa Carlos Paz.
Los temores previos a la temporada comenzaron a confirmarse apenas se iluminaron las primeras marquesinas y se levantaron los primeros telones. No es una temporada fácil para el teatro en Villa Carlos Paz.
Cuando otros años la mayoría de las salas firmaba contratos, confirmaba obras o concretaba la presencia de sus figuras entre 90 y 120 días antes del comienzo de la temporada, este año muchas de las salas grandes de la ciudad turística terminaron cerrando su cartelera estival a pocas horas del anuncio oficial del “Veranón”.
Así, salas que hace dos años se llevaron el oro, como el caso del teatro Coral con el espectáculo de Fátima Florez (que repitió en 2017) estuvo a horas de no tener show. Sin embargo la muñeca del productor Miguel Pardo logró ubicar allí al Flaco Pailos con su Solo de humor, y poner al Mago Emanuel con su espectáculo en el teatro Libertad, el cual era destino original del humorista cordobés.
La cartelería confunde
Aún hoy, con la mayoría de las obras en pleno desarrollo de funciones, algunos carteles y anexos de las marquesinas permanecen con gráficas de la temporada pasada o de shows presentados durante el año en las diversas giras que tocaron la villa como destino.
“Fuera del top tres, va a ser una temporada muy difícil”, confesó un productor teatral unos días después de los primeros estrenos. “Sólo los tanques van la van a romper, después hay que evaluar el negocio de los unipersonales, pero las obras ‘medianas’, la van a pasar mal”, detalló la fuente con palabra autorizada en la materia.
Varias causas
Entre los factores económicos y sociales que rodean la actualidad nacional, hay otros hechos que desencadenan este escenario de incertidumbre en el que se ve sumergido el sector. Saturación de la plaza, abundancia de entradas 2×1 y un sorpresivo boom de espectáculos a la gorra, incluyendo una gran producción como Bollywood, dejan en claro que la cosa no está para tirar manteca el techo.
Tan es así que la sala con la ubicación céntrica más estratégica que tiene la villa como lo es el Teatro Bar, está hoy ocupado por un espectáculo a la gorra, algo inimaginable en la “Capital Nacional del Teatro”, como le gusta llamar a los políticos provinciales y nacionales a Villa Carlos Paz desde 2012. En aquel año nacía el fenómeno de Stravaganza y las nuevas inversiones teatrales que ayudaron a que Carlos Paz superara a Mar del Plata, la reina indiscutible de la actividad hasta aquel momento, tanto en entradas vendidas como en espacio en los medios nacionales.
Cuando los preparativos de fin de año ya comienzan a verse en las mesas de las familias argentinas, en las celebraciones de los artistas en la villa seguramente brotarán las conversaciones sobre las estrategias y caminos para llegar a marzo. Por ahora, el verano 2018 no tiene pinta de ser el “segundo semestre”.
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