En un duelo muy parejo, Quilmes, apoyado en una gran actuación colectiva, sobresaliendo lo hecho por Diego Romero y Walter Baxley, ambos con 15 puntos se quedo con un valioso triunfo sobre Boca por 8 puntos, 58-66, en su visita a la “Bombonerita”.
Un inicio muy parejo donde ambos equipos hacían predominar las ofensivas sobre las defensas, intercambiando punto por punto, destacándose en el Xeneize la efectividad de Isaac Sosa desde el perímetro con 9 puntos (3/5 en triples), mientras que el “Tricolor” repartía su goleo en todos sus titulares, terminando el primer cuarto con el dueño de casa ganando por la mínima 20-19.
Un parcial de 0-7 de Quilmes en los primeros minutos del segundo cuarto con triple de Diego Romero incluido, sumado a una solida defensa en la primera línea impidiendo las conexiones de Faggiano con Calderón, sacando una luz de 5 puntos, 22-27, haciendo que Rolando Córdoba pidiera minuto para cortar el envión de los marplatenses. Al regreso de este, los de Ramella se “secaron” en ofensiva y sufrían en defensa un gran pasaje de Matías Sandes que le permitían acortar la brecha a un punto, 28-29, obligando esta vez al entrenador del “cervecero” a parar el juego para reacomodar a sus muchachos. Poco cambio en los minutos finales, yéndose al descanso largo nuevamente con los locales arriba por un punto, 34-33.
En el arranque del tercer cuarto el duelo seguía igual de parejo, intercambiando más errores que aciertos, en esa dinámica Quilmes cambio por puntos un triple y un doble de Marín y una “corajeada” de Baxley sacando una luz de 7 puntos, 35-42, Córdoba paro las acciones y como si fuera un deja-vú del primer cuarto, Boca se acercó a un punto, 43-44. Los minutos finales continuaron intercambiando ataque por ataque, entrando al cuarto de la verdad con el “tricolor” imponiéndose por la mínima, 47-48. La mala para los de Ramella era que tanto Clark como Marín acumulaban cuatro faltas personales.
El conjunto marplatense salió con más decisión al último parcial sacando una renta de 8 puntos, 51-59, cuando promediaba el mismo, con una muy buena tarea de todos sus hombres, sobre todo sus internos (Gallizi, Wolkowysky y Romero) que aprovechaban la superioridad de altura para complicar al Xeneize que sufría la corta rotación de hombres altos. Pero que sumaba uno más a los problemas con faltas, ya que Vildoza también sumaba cuatro personales. A pesar de eso, el “tricolor” continuo manejando el trámite del partido y con un bombazo de Maximiliano Maciel aseguró su segundo triunfo en la ruta y su tercero en condición de visitante (le ganó a Peñarol en esa situación), esta vez por 8 puntos, 58-66.
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