Una vez más se volverán a ver las caras, desde las 21.30 en el Polideportivo, reeditando una nueva edición del superclásico marplatense que tiene la Liga Nacional de Básquetbol. Con ausencias marcadas por el lado de Peñarol: sin Fabián Sahdi y Leonardo Gutiérrez, pero con un debut que promete: el uruguayo Martín Osimani. En la vereda de enfrente, Quilmes no contará con Federico Marín, arrastra una lesión, pero si con el resto de la plantilla para lograr un triunfo que le permita tomar envión para escalar posiciones en el certamen.
Peñarol tiene el peso de la historia (64 victorias y 29 derrotas) y la tabla (con un segundo lugar expectante, con chances de ser puntero), una supremacía que mete miedo pero no cuenta a la hora de jugar.
Sin embargo, en esta oportunidad habrá una cuestión diferente, ya que su jugador emblema no estará en cancha. Se trata de Leonardo Gutiérrez, quien sufrió un desgarro en el isquiotibial derecho que lo tendrá cerca de 20 días afuera, sumado a la falta de un base natural, como el ex Quilmes Fabián Sahdi.
Pero no todo es negativo para el último campeón, ya que se producirá el debut del uruguayo Martín Osimani, quien llegó el jueves para reemplazar al cortado Justin Giddens. Su arribo, además, decantó en la baja de Reger Dowell, quien fue fichado para reemplazar temporalmente a Fabián Sahdi (todavía sin recuperarse del desgarro que lo tiene afuera desde el 8/1) pero cuyo aporte en estas semanas fue nulo.
Los orientados por “Tulo” Rivero llevan cuatro victorias seguidas y tres de ellas fueron en casa, donde tendrá otros tres partidos antes de volver a la ruta. Después de Quilmes vendrán Obras y Gimnasia, puntero y tercero de la zona. Por lo tanto, salir victorioso de esta serie es fundamental para las aspiraciones “milrayitas” de quedarse con la punta de la zona al finalizar la temporada regular.
Para Quilmes, en tanto, será una chance perfecta para motivarse y cambiar la cara después de la dura derrota en la última presentación, 95-91 ante San Martín en Once Unidos. No sólo por ser ante el rival de toda la vida, sino porque la necesita para no perderle pisada a Gimnasia (25-14, 64.1%) en esa búsqueda del tercer lugar.
Finalmente el “cervecero” tendrá la baja confirmada de Federico Marín, ausente desde el 13 de enero por un problema en un nervio de la columna (todavía no volvió a entrenarse). Lucas Ortiz regresó ante San Martín e irá sumando minutos de a poco tras dejar atrás un golpe en la rodilla; mientras que Diego Romero jugará pese a arrastrar un esguince en su tobillo derecho.
