Portada, Ciudad

La Jefatura Departamental de Policía sigue siendo un manto a la impunidad

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Desde la misma Jefatura Departamental se blinda la información frente a hechos criminales públicos, la negación es la regla y no la excepción. La línea de órdenes parte de la fiscalía General de Fabián Fernández Garello, un viejo conocido de cómo se imparte la justicia en General Pueyrredón. No debería extrañar lo sucedido a una joven detenida por la policía a la salida de un boliche céntrico, que ha tomado trascendencia en las últimas horas.

Hace también muy pocas horas tras la sentencia en el caso Claudia Reppeto, se dictaron en la misma recomendaciones a la policía bonaerense que no dejó incumplimientos por cometer cuando le tocó intervenir. Había testigos que señalaban el lugar donde el cuerpo había sido enterrado, aunque diversos operativos de búsqueda fracasaron en el mismo espacio que era inspeccionado por policías que dependen de la Jefatura Departamental.

Lamentablemente, muy lamentablemente, estremece conocer que el autor del femicidio y condenado a prisión perpetua, Ricardo Rodríguez, fue atrapado hasta lograr su detención por policías que llegaron alertados al lugar donde había sido retenido por los hijos de Claudia Repetto.

El barrio Termas Huincó fue el escenario de este descalabro que mereció a través de un fallo judicial las advertencias y recomendaciones a la propia policía, la cual no sólo resultó ineficaz para hallar el cuerpo con operativos que se hacían dentro del perímetro que denunciaban los testigos, es decir ni vieron la tierra removida.

Los vecinos y familiares también señalaban como principal sospechoso al mismo Ricardo Rodríguez y daban cuenta que luego del asesinato permanecía en la zona, a tal punto que los propios hijos fueron quienes debieron atraparlo.

La jefatura Departamental se ha mantenido incólume frente a tamañas irregularidades que también contaron con la acostumbrada protección mediática, la misma que accede a la información de la jefatura Departamental de Gascón y Entre Ríos.

Y Berni ? De buenas migas con su amigo el intendente Guillermo Montenegro. Todo es más de lo mismo.

EL CASO DE ABUSO POLICIAL

Una joven de 25 años denunció abuso policial por parte de un efectivo a la salida del boliche el domingo a la madrugada en Mar del Plata.

Luego de que se dieran a conocer las imágenes de la brutal detención la mujer sostuvo que en ningún momento le dieron los motivos por los que había sido arrestada.

El vídeo fue publicado por una de las testigos del momento. Se observa que sin mencionar el porqué un policía la detuvo el domingo alrededor de las 6 de la mañana a la salida del boliche Club 26, en avenida Independencia y Alberti.

Cuando la joven se resiste el efectivo la tira al piso y forcejeando le puso las esposas: “Cuando salíamos, mi hermana se había adelantado una cuadra más. Yo la intenté alcanzar y en la esquina paró un patrullero porque había disturbios en la esquina y cuando intenté pasar, un efectivo policial masculino me agarró y me puso contra el patrullero“, denunció.

En el vídeo se escucha cuando le exige que no la toque y que se identifique pero el policía continuó con la agresión y la redujo en el piso. Minutos más tarde llegó una oficial mujer y la subió al patrullero.

“Cuando me tira al piso me empieza a forcejear el brazo para ponerme las esposas, logra hacerlo y me pone la mano atrás. Yo me estaba sosteniendo la ropa porque sino me iba a quedar desnuda. Me pedía la otra mano y me ajustaba más la otra esposa para que me doliera y acceda a darle el brazo”, manifestó.

La mujer estuvo tres horas detenida en la Comisaría y sostuvo que nunca le dieron los motivos de porqué había sido arrestada: “Me enteré por qué me habían arrestado después de estar tres horas en la comisaría cuando me dan un firmar un papel en el que yo supuestamente estaba por conflictos en la vía pública y yo no estaba ni enterada de lo que había pasado”.

Acerca de cómo vivió el momento la joven relató: “Fue horrible. Estaba en un cuartito y ese día hacía mucho frío. Yo estaba de pollera y un top con la espalda descubierta y estuve las tres horas muriéndome de frío hasta que viene una policía que me preguntó si estaba bien, le dije que me estaba descomponiendo del frío y ahí sí me trajeron una campera”. (DIB)

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