Lo afirmó el diputado provincial por Cambiemos, Guillermo Castello, luego que la Cámara de Diputados bonaerense aprobara y girara al Senado la Emergencia en Infraestructura, un pedido expreso de la gobernadora María Eugenia Vidal que le permitirá al Ejecutivo, durante el término de un año, acelerar los plazos de licitación y adjudicación de las obras públicas provinciales.
La llave para aprobar el proyecto fue el acuerdo con el Frente Renovador y el Frente Amplio Progresista, mientras que el kirchnerismo votó en contra, criticando fuertemente el proyecto.
En tal sentido, el legislador bonaerense aclaró que “la emergencia en Infraestructura apunta a paliar el terrible déficit en obra pública dejado por el gobernador Scioli, quien en sus ocho años de mandato, sólo invirtió el 2,5 % del presupuesto provincial a ese rubro. Por eso es que tenemos una provincia con hospitales, escuelas y rutas destrozadas, que se inunda todos los años y con un serio déficit de cloacas y agua potable”.
Respecto de la negativa del bloque kirchnerista a acompañar el proyecto de la gobernadora, Castello precisó que “la postura del Frente para la Victoria es patética. Después de gobernar ocho años con superpoderes y un festival de emergencias, dejaron 180 obras inconclusas, la obra pública paralizada y ahora se rasgan las vestiduras por la supuesta falta de controles del proyecto”.
Para finalizar, el legislador marplatense señaló que “esta ley es una medida excepcional que va a darle cauce al plan de obra pública más ambicioso de los últimos 20 años. La sección y Mar del Plata serán beneficiadas con este plan, por ejemplo, a través de la construcción de la Autovía en la Ruta 88”.