Los miembros de la Comisión de Legislación tomaron conocimiento de un informe de la Procuraduría Municipal, en relación al caso del ciudadano Fabio García, quien entabló acciones legales contra el Municipio, a raíz de la sustracción de un carro panchero de su propiedad, que se hallaba en el depósito de la Delegación Municipal Puerto, tras haber sido secuestrado en el acceso al Alfar por inspectores municipales el 23 de enero de 2013.
El Procurador, Dr. Mariano Perticarari reconoce, en el informe que “al momento de reintegrar el carro, al hacerse presente García, en el Distrito Vieja Usina, se constató la inexistencia de los siguientes: elementos la balanza una paellera, bebidas alcohólicas y el módulo de elaboración de panchos. Iniciado el procedimiento administrativo tendiente al pago de supuestos daños, García presenta, en mayo del 2013, una suma de $ 12.500 como contraprestación del valor del carro y una indemnización devenida en $ 23.000 pesos”
Perticarari corrobora que “tal como indica el reclamante la sustracción del carro, en el depósito, es un hecho que no ha sido negado en la construcción de la demanda, ya que surge de las propias constancias del expediente administrativo y ha sido ratificado por los funcionarias del área competente. No obstante, han sido cuestionados los rubros indemnizatorios por excesivos”.
Por consiguiente la Comisión resolvió realizar una investigación interna sobre las responsabilidades del personal municipal en la sustracción del carro panchero y, en ese sentido, solicitó informes al Departamento Ejecutivo.
Cabe traer a colación que, el 28 de agosto, el damnificado presentó una nota, por Mesa de Entradas del HCD, registrada con el Nº 214/2014, en la que solicita que se realice juicio político al Intendente Municipal y que se le otorgue un subsidio o, en su defecto, un préstamo equivalente al del precio del carro, con el cual poder paliar su situación económica, aclarando que “en caso de que algún mal pensado sospechare que este pedido es parte de una acción defraudadora, entonces, que ese monto se me otorgue en calidad de préstamo, a devolver luego de que se dicte sentencia en dicha causa”.
Asimismo García exige, a los concejales Héctor Rosso y José Cano, una indemnización con una suma de dinero equivalente a dos sueldos básicos de la categoría inferior en el escalafón administrativo, fundamentándose en que, en ocasión de la reunión de Comisión, realizada el 22 de septiembre, sin advertir su presencia, “se burlaron del tenor de mi expediente, riéndose a carcajadas tan sonoras que retumbaban en la sala de audiencias, situación que cesó luego de que el concejal Mario Rodríguez les dijera: “Miren que el señor García está presente”.
Concluyendo que “esa bochornosa situación me ha causado daños y prejuicios morales, desde que me vi ofendido, agredido, abusado, deshonrado, humillado, denigrado y estafado”.
Roberto Latino Rodríguez
