Así lo afirmó el fiscal de Delitos Complejos Jorge Paolini, tras la detención de Emiliano Giri en la madrugada de este martes, por una investigación que involucra contratos truchos en el Astillero Río Santiago y con la que podría recibir una pena de 2 a 10 años de prisión.
El fiscal que interviene en la causa, manifestó al medio TN, que Giri “al tiempo de los hechos era un dirigente político que estaba en algún modo tratando de juntar voluntades para poder candidatearse a concejal o a intendente”.
Asimismo, Paolini destacó: “había un circuito paralelo de liquidación de pagos para la modalidad de un determinado contrato”.
A su vez agregó que “liquidaban pagos y hacían contratos con nombres de otras personas, en su mayoría gente humilde, indigentes o vendedores ambulantes que desconocían la situación”.
El fiscal aclaró que la maniobra fraudulenta se llevó a cabo “entre 2012 y 2013” y que se “falsificaban recibos de cobro de hasta un millón de pesos por mes”.
Finalmente declaró que “estos hechos de corrupción tardan mucho tiempo en salir a la luz y demandan investigaciones muy largas, de 95 casos de contratos falsos, hemos tenido que verificar cada uno de ellos”.
Por otra parte, el letrado defensor de Giri, Héctor Granillo Fernández, adujo que su defendido “lo único que hizo fue proponer a militantes que necesitaban trabajo” y añadió que “no hay ningún papel que lo comprometa”.
Granillo Fernández, anticipó además que pidió la excarcelación y que ahora el juez de Garantías Fernando Mateos deberá resolver la situación del imputado.
La realidad le dio otro cachetazo a Arroyo. Que arrepentido debe estar de no haber apoyado a Razona cuando le hizo saber que la Municipalidad era un NICHO DE CORRPUCION !!!