Si a la AFA, que viene deteriorándose a pasos agigantados. Si ya está en ruinas institucionalmente. Si ha perdido el respeto de aficionados y allegados a la organización del fútbol argentino, no debe resultar extraño que expulse al doctor Roberto Fernández, quien construyó su carrera en la Asociación del Fútbol Argentino, desde la cuna de la entidad.
La cuestión de fondo, es que Luis Segura no logra bloquear la llegada de Marcelo Tinelli a la presidencia de la AFA. Segura sabe, pero no asume, que está en un interinato, en una transición que necesita ser cerrada tras la desaparición física de Julio Grondona. La salida del doctor Fernández, como presidente del Consejo Federal, tardará en ser restaurada lo que resta en el tiempo, para que Tinelli sea consagrado como nuevo presidente de la Asociación del Fútbol Argentino.
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Ser presidente del Consejo Federal, es la representación misma de la AFA del interior, que está constituida, por ligas y clubes tan importantes como la AFA misma. El diseño es federal pero el poder se ha concentrado en Viamonte 1366, en pleno centro porteño. Desde allí y hasta por razones de concentración de clubes se ejerce el poder, y obviamente, la presencia de River y Boca, junto a Independiente, Racing y San Lorenzo, inclinan la balanza.
Manejar la relación de las ligas en el interior del país, es tarea propia de un experto, de un especialista y de un profesional. Jorge Roberto Fernández ha consagrado su vida con pasión profesional, a recorrer peldaño por peldaño la escalera, que lo llevó a ese sitial privilegiado, que realmente muy pocos pueden ostentar y otros muy pocos pueden cumplir. Es de los que han compartido su familia, con sus actividades. Son de los que han abrazado con compromiso una función súper complicada, como es administrar los intereses de todo el futbol del interior, compuesta por cientos de ligas, miles de clubes y millones de jugadores.
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Quien ha demostrado que es capaz de acceder, en la Asociación del Fútbol Argentino, a la representación de todos los clubes del territorio nacional, en un país como la Argentina, merece el reconocimiento público, el mismo que tiene en cada provincia que visita en cumplimiento de sus funciones.
Su desvelo pasa por el fútbol de las divisiones menores. Desde su militancia como miembro de comisiones de esa categoría, comenzó a forjarse como dirigente local, hasta alcanzar su designación como titular del Consejo Federal. Nadie le regaló nada ni fue elegido a dedo como tampoco impulsado por la política de ningún tipo, lo cual valoriza aún más su gestión.
Seguramente el método para alejar a Fernández, tenga un efecto boomerang, y desde ahora en más se precipiten las decisiones, que lleven a Tinelli a convertirse en el nuevo presidente de la AFA. Conociendo a Fernández, es muy difícil pensar que no haya protegido el futuro de los clubes del interior, en la decisión que molestó tanto al actual presidente de AFA. Su desplazamiento habla a las claras que todo este proceso tiene fecha de vencimiento: la misma que se fije para la elección de las nuevas autoridades.
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Córdoba, Tucumán, Mendoza, el Valle del Río Negro, la Patagonia, están comprendidas en la estructura que compone el Consejo Federal. Este organismo del futbol argentino regla y media, entre los distintos actores, para aproximarnos a la complejidad que requiere ser eficiente, tener experiencia y profesionalidad, para articular las mejores decisiones en un marco en el cual no se eximen las presiones, muy por el contrario.
Anoche en la apertura del programa de mayor rating de la televisión argentina, Marcelo Tinelli elogió al doctor Roberto Fernández, dando a conocer su situación ante millones y millones de argentinos. No se sabe cuáles son los planes profesionales, empresariales y como dirigente de Tinelli, pero sonó a cómo que necesita un Matías Lammens en la AFA.
Seguramente Tinelli, recuperará a Fernández, tras ésta movida que lo ha popularizado y sacado de su bajo perfil, lo instaure a este vecino nuestro, al que de golpe la torpeza de un hombre con el poder agotado, lo ha sacudido injustamente.
Jorge Elías Gómez
Excelente columna.
EL DIRIGENTE ES HIJO DE AUTÓCRATA DEL FÚTBOL LOCAL, JORGE BOSCO, Y POR ENDE UN SOLDADO DE GRONDONA.
AHORA, COMO EN LA AFA LA LEALTAD SE MIDE POR NEGOCIOS, FERNÁNDEZ, QUE NO ES NINGÚN LELO QUISO PRIMEREAR EL FUTURO Y SE HA TIRADO EN AGUAS PROFUNDAS CON LA SUPUESTA IDEA QUE EL FUTURO ES TINELLI..
AHORA LA PREGUNTA QUE SUBYACE QUIÉN AUTORIZÓ AL DESPLAZADO DIRIGENTE A TOMAR POSTURA EN CONTRA DE LA VIEJA GUARDIA AFISTA…