Albanese afirmó que, respecto de la actualidad del transporte, “debería decir que es dramática, pero digamos muy compleja, muy difícil. Una situación donde hay mucha incertidumbre, donde no hay anuncios claros para el sector, se habla de una reducción de subsidios del 35 % a partir del 1 de enero, se habla que en tres tramos desaparecería, pero son todas especulaciones, no hay anuncios, las reuniones con los funcionarios de provincias son muy desalentadoras, la provincia no va a tener fondos tampoco para subsidiar al transporte. La verdad que es un panorama muy desalentador, muy preocupante y a la espera de encontrar algún grado de certidumbre”.
Mientras tanto, anunció que la Cámara que preside le pidió una reunión al Intendente Lunghi “para explicarle cuál es la situación del transporte en Tandil y cuáles son las posibilidades en adelante. Y también tenemos pendiente una reunión con la Comisión de Transporte del Concejo Deliberante, para hacer algunas solicitudes y propuestas”.
Recordó Albanese que el próximo aumento determinado por la fórmula polinómica aplicada por Ordenanza, será en febrero, “pero nosotros estamos evaluando la posibilidad de pedir un aumento de emergencia, porque una devaluación del 118 % es imposible de sostener en el tiempo. Además, estamos hablando de una inflación que se proyecta para diciembre de 30 % y se habla de diciembre, enero y febrero cercana al 100 % en la suma de los tres meses. Con lo cual, va a ser muy complicado para el sector del transporte, poder sostenerse, poder seguir prestando el servicio, y habrá que tomar algunas medidas”.
Al respecto, aclaró que la solicitud a las autoridades locales, es de un aumento “de emergencia”, entendiendo que no puede dilatarse en el tiempo. “Tienen que tratarlo rápidamente, si no, no es de emergencia. Si no, para cuando venga el aumento, no sé si vamos a estar funcionando. Con esto te digo la situación como viene. No estoy exagerando ni dramatizando, pero esto es a nivel país, no pasa en Tandil, pasa en todo el país, pasa en el AMBA, habrán escuchado ya anuncios de paralización del transporte en el AMBA, por ejemplo, y demás. Esto es muy difícil”.
“Nosotros hicimos el cálculo del valor que debería tener el boleto, sin subsidio, y nos da $550. Con subsidio nos da $460, porque actualmente el subsidio es $80 por pasajero. Con lo cual, estamos en $233, estamos bastante lejos”, aseguró el transportista.
En ese sentido, sostuvo que en el actual gobierno nacional, “la idea aparente es reducir los subsidios. Nosotros creemos y estamos de acuerdo en que hay que cambiar el esquema y hay que subsidiar la demanda y no la oferta. Pero bueno, todo eso lleva tiempo implementarlo y mientras tanto, tenemos que tratar de capear el temporal y de subsistir de alguna manera”.
Por otro lado, criticó la situación de que el transporte público está pagando el combustible más caro que los particulares. “El combustible es más barato en el surtidor de una estación de servicio que a granel directo de YPF. Es una cosa de un país de locos. No lo podemos entender. No sabemos por qué, pero es así. Nosotros compramos directo de YPF, sin intermediación”, y añadió que “si no está la plata, YPF no te manda el combustible. Vos tenés que hacer el depósito de la cantidad de litros, te dicen cuánto tenés que poner, tenés una cuenta en YPF, depositás y cuando ingresó el dinero, ahí te sale el camión para acá”.
Finalmente, confirmó que “en el periodo estival de enero y febrero, donde la recaudación se desploma, sin dudas, va a haber una racionalización de servicios, porque no hay manera de prestar el servicio en los términos en los que lo veníamos prestando. Es imposible. No hay recursos, no hay manera de conseguir ni el combustible, ni los repuestos, no tienen idea lo que aumentaron los repuestos, lo que cuesta hacer un motor, la verdad, es dramático, no quiero victimizarme, pero es muy difícil”.