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El sector pyme vive una situación de emergencia y alerta que “la caída de las ventas está dejando a muchos comercios fuera de juego”

Las pequeñas y medianas empresas denunciaron que, tras la fuerte suba de tarifas, sobre todo de luz, en algunos comercios se han equiparado con los costos de alquiler. Así lo denunció la Asamblea de Pequeños y Medianos Empresarios de Mar del Plata (Apyme), y además manifestó que este factor, sumado a la baja de las ventas viene potenciando una situación de real emergencia.

La Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP), confirmó este panorama el lunes cuando informó que su relevamiento para conocer la evolución de las ventas minoristas arrojó como resultado general una disminución del 20,9% en el mes de abril, midiendo unidades físicas. El porcentaje también fue negativo del 13,8% comparado con marzo.

La Unión del Comercio, la Industria y la Producción (UCIP), confirmó este panorama el lunes cuando informó que su relevamiento para conocer la evolución de las ventas minoristas arrojó como resultado general una disminución del 20,9% en el mes de abril, midiendo unidades físicas. El porcentaje también fue negativo del 13,8% comparado con marzo.

El preocupante cuadro tarifario

“En los comercios particularmente se están viendo incrementos de los costos, de los insumos, de los alquileres y las tarifas, una situación que las viene hackeando de una manera importante. La situación es muy extraña ya que ni siquiera se vivió siquiera cuando el valor de las tarifas se multiplicó por 1000% o por 2000% no hace tantos años atrás, y realmente nos preocupa porque hoy por hoy el impacto de las tarifas está dejando fuera de juego a más de un comercio. Estamos hablando de una multiplicación por tres o por cuatro de los costos sin saber a ciencia cierta cómo van a venir las próximas boletas de luz, y en aquellos comercios que tienen una fuerte incidencia del consumo de electricidad, fundamentalmente vinculados con los rubros alimenticios, desde una heladería y una rotisería, hasta una fiambrería o un almacén, vienen registrando valores de tarifas, de luz fundamentalmente, en muchos casos empatan con el valor de los alquileres”, explicó Casciotti.

Esta es la situación de las PYMES hoy en día, y frente a los aumentos. Aún falta que se aplique completamente la quita de subsidios, lo que según el titular de Apyme configura una situación de alerta: “Esto genera una fórmula explosiva porque sumado a la caída de las ventas está dejando a muchísimos comercios fuera de juego”.

Casciotti también remarcó que, si bien las pequeñas y medianas empresas son capaces de soportar un tiempo esta situación, el panorama no es positivo ya que no es previsible una mejora: “No tenemos un panorama alentador que nos haga avizorar un escenario en donde empiezan a ordenarse estas variables. Fundamentalmente porque en el marco de las políticas que se vienen desplegando, y lo vemos con claridad en la reciente media sanción de la Ley Bases que consolida el jaque mate para la pequeña y mediana empresa. Y lo decimos desde varios planos, porque es una ley que no contiene absolutamente ninguna medida en favor, ni de la industria nacional, ni del mercado interno, ni de los trabajadores y eso opera un desmedro de la pequeña y mediana empresa, con lo cual a no ser que se revierta esta situación en el Senado no vemos un escenario que priorice el impulso del desarrollo económico nacional. Y en paralelo, un cuadro tarifario, totalmente liberado, dolarizado que realmente nos preocupa”.

Respecto al cuadro tarifario especificó: “Hoy por hoy estamos con un tipo de cambio planchado, pero no sabemos cómo va a proseguir en los próximos meses. En la medida en que aumente el dólar o que se modifique el tipo de cambio, vamos a volver a tener impacto en las tarifas. Con lo cual evidentemente y con esta quita de subsidios, va a terminar profundizando una ecuación que está divorciada de los intereses de la industria y del comercio. Decimos esto con preocupación porque incluso va a contramano de lo que pasa en el resto del mundo, donde todas las tarifas están subsidiadas para acompañar el desarrollo de la industria y del comercio de cada uno de los países. Esta bandera que se agita para volver a los costos reales de las tarifas no es lo que sucede en el resto del mundo donde se protege y se cuida la industria y al comercio”.

Seguidamente Casciotti dijo: “Nosotros siempre insistimos en el carácter histórico de la PYME como sostenedora de empleo y defensora de su emprendimiento. El empresario PYME, cualquier sea su envergadura, siempre le mete para adelante, siempre trata de encontrarle la vuelta para sostener esa esa pyme que es como una hija y a sus empleados que forman parte, yo te podría decir, de la familia. Hasta ahora lo que vemos es una pérdida de empleos por goteo, empresas que vienen aguantando y sosteniendo luego de 14 meses de ventas a la baja. Pero evidentemente el escenario de estos próximos meses, mayo y junio, no es alentador porque la ecuación económica se va acotando. Hay un informe muy interesante de hace un par de días que da cuenta que cerca del 15% de las pymes industriales están en problemas y eso representaría un riesgo de cerca de 150.000 a nivel nacional puestos de trabajo. Nosotros tenemos en Mar del Plata una matriz productiva interesante, con una presencia importante de la industria, y obviamente esta situación que se da en promedio a nivel nacional no va a ser ajena para Mar del Plata”.

Subas y bajas en las listas de precios

“Por otro lado vemos un cuadro abusivo de aumentos, no solamente en las tarifas sino en el valor de los insumos. Pensemos que la industria se provee de insumos que en general son provistos por monopolios u oligopolios, que vienen teniendo incrementos muy por encima de lo que pasa en el resto del mundo. Lo vemos por ahí con valores emblemáticos como el de la chapa, que hasta hace unos meses estaba el kilo a 1,55 dólar mientras que, por ejemplo, se podía conseguir en China a 55 centavos. Pero como hay restricciones para la importación el que produce localmente no puede acceder a esa materia prima o ese insumo menor valor”, agregó.

En este sentido, el gobierno nacional remarcó que la situación está mejorando y hizo referencia a que se están observando bajas en las listas de precios, señalando una deflación. Sobre esto Casciotti opinó: “En principio la situación es muy variada y disímil según las marcas o las líneas de productos. Nosotros vemos por un lado que sistemáticamente los proveedores siguen acercando listas nuevas con un 8, 10 o hasta 12% promedio de suba mensual y en paralelo, vemos determinadas líneas de productos que empiezan o a aplicar bonificaciones o descuentos, a veces por cantidad, u otras veces directamente entregan productos bonificados o con rebaja en la lista de precios. Nosotros lo atribuimos claramente a un desplome de las ventas, a un sobre stockeo de esas empresas y en esta necesidad de hacer caja para rotar la mercadería”.

Eso obviamente beneficia en principio al consumidor porque el producto en góndola está llegando con menor precio. De cualquier manera, me parece que tenemos que hacer una consideración no menor: la brecha que se ha generado entre el nivel de los ingresos y el de los productos y servicios que el consumidor necesita comprar mes a mes se ha profundizado últimamente. Entonces, aunque ese producto termine estabilizando en el precio o aun bajando 10 o 20 puntos como ha sucedido sobre todo en el caso de las grandes marcas de productos alimenticios que han o estabilizado o incluso bajado algunos precios, el cliente sigue sin poder llegar a los precios”.

Sobre los aumentos más fuertes, que se dieron en diciembre dijo: “Nos da cuenta del feroz aumento que han tenido los productos en los últimos meses. Solamente en el mes de diciembre empresas como Molinos o Arcos aumentaron de un día para el otro más del 60% sus productos y luego se escalada siguió ubicándolos prácticamente en más del 100 o el 120%. Hoy están bajando un 10 o 20% demostrando, por un lado, el abuso en esos aumentos y por otro lado el desplome de las ventas, que los obliga a bajar los precios en el marco de una recesión, en donde obviamente necesitan hacer caja y mover el stock porque son particularmente productos con fecha de vencimiento”.

Caída de las ventas y la capacidad de consumo

Casciotti señaló que gran parte de las ventas de muchos rubros se sostiene a partir del impulso de promociones bancarias y billeteras virtuales. “El cliente está a la búsqueda permanente de esos descuentos, eligiendo los días, eligiendo las tarjetas que aplican descuentos. De hecho, hay sectores que han logrado medianamente sostenerse en función de estas promociones, muchas veces impulsadas por el propio comercio para potenciar las ventas y otras veces con la ayuda de las entidades bancarias. Hoy por hoy son grandes sostenedores de la venta sin embargo no alcanza, porque vemos también una actitud muy prudente por parte del consumidor”.

Además, el titular de Apyme resaltó que se dan dos situaciones particulares en este cambio de actitudes en el consumo: “Por un lado tenemos a aquel consumidor que no llega a fin de mes y que ve menguado su volumen de compras porque no puede acceder a tal o cual artículo y hay determinados rubros que son totalmente prescindibles para él. Pero también vemos, día a día en el mostrador, otro sector de la sociedad que aun teniendo todavía la capacidad para comprar o el cupo en la tarjeta de crédito se abstiene preventivamente, porque ve un panorama incierto, porque no saben definitiva cuál va a ser el valor de la boleta de luz y gas de los próximos meses o porque no sabe cómo va a evolucionar el importe de su prepaga, entonces en general hay un ajuste que cada una de las familias viene haciendo. Esto obviamente impacta en la caja de las pymes que venden menos: pensemos en indumentaria, en productos textiles, en calzados, marroquinería, sectores tal vez más prescindibles”.

PortalUNMDP

 

 

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