El próximo viernes 15 a las 19, el obispo de Mar del Plata, monseñor Antonio Marino presidirá la misa con motivo del 40° aniversario del Servicio Sacerdotal de Urgencia. La celebración será en la Catedral de los Santos Pedro y Cecilia, estarán presentes miembros fundadores de este servicio de la Iglesia católica de Mar del Plata y voluntarios, guardianes, entre otros.
En una carta dirigida a todos los miembros del Servicio Sacerdotal de Urgencia, Marino remarcó, “como obispo de Mar del Plata, deseo encabezar este aniversario dando gracias a Dios por todos los sacerdotes y numerosos laicos que desde entonces han brindado este servicio de caridad, con los ojos iluminados por la fe. Bajo esa luz han sabido reconocer en el enfermo y en sus familiares al mismo Cristo sufriente que en ellos sigue prolongando su agonía”. “Comprometo mi oración para que este fundamental testimonio de caridad sea una de las formas de mostrar lo que somos por naturaleza: Iglesia de Pentecostés, Iglesia en salida al encuentro del hermano que sufre y está necesitado. ¡Salgamos a proponer a todos la vida de Jesucristo!”, concluyó el pastor de la Iglesia católica local.
Con gran entusiasmo los voluntarios preparan este gran festejo de esta pastoral caritativa, que funciona diariamente de 22 a 6, a través de la línea 133 o 495 9966. “Somos un grupo de la Iglesia diocesana que nos encargamos de llevar atención espiritual y sacramental a nuestros hermanos ‘más pobres entre los pobres’: los enfermos, asistiéndolos en el domicilio particular o centro de salud donde somos requeridos en el dolor de una enfermedad o la proximidad de la muerte”, explicaron algunos voluntarios. El grupo está conformado por cien laicos aproximadamente, y treinta sacerdotes que están distribuidos en equipos de tres laicos y un sacerdote por cada día del mes. El Servicio Sacerdotal de Urgencia funciona durante todos los días del año, incluso feriados, Navidad y Año Nuevo “esta pastoral, por fuerza de la necesidad a la que intentamos responder, no se puede interrumpir”, manifestaron.
Horacio, uno de los miembros del servicio enfatizó sobre la labor como voluntario, “lo más conmovedor es cuando a pesar de los difíciles momentos que viven los familiares de los enfermos a los que visitamos, todos, absolutamente todos, nos abrazan con un agradecimiento, sincero, emocionado y en la mayoría de los casos, con llantos, propios de las circunstancias, pero las muestras de agradecimiento, son francamente gratificantes. El valor que le otorgan al tríptico que les entregamos, en general es muy grande y lo valoran y veneran muy particularmente”.
La historia en Mar del Plata, comenzó con monseñor Pironio
“Corría el mes de abril de 1974 cuando el periodista y comentarista radial Oscar “Cacho” Cuperman, trae a Mar del Plata la idea de crear el Servicio Sacerdotal de Urgencia, institución laical nacida en Córdoba que ya venía funcionando allí y en las diócesis de Capital Federal, Mendoza y Tucumán. Por este motivo visita a, en ese entonces, nuestro querido obispo Monseñor Eduardo Francisco Pironio quien le da el visto bueno para emprender en nuestra ciudad esta obra de amor y de servicio. De esta manera, “Cacho” convoca a un grupo de laicos y monseñor Pironio nombra al presbítero Remo Mariotti como primer asesor espiritual de nuestro servicio sacerdotal”, detallaron en la revista que han preparado por este 40° aniversario.
“Una de las cuestiones que urgía resolver era determinar el espacio físico en el cual se desarrollarían las actividades del servicio. Vale la pena destacar la gestión que hiciera el presbítero Carlos Malfa, quien nos sugirió le solicitásemos a nuestro obispo la sesión de la planta alta del chalet propiedad del Obispado, ubicado en 25 de Mayo 3246, a lo que accedió de inmediato y desde entonces hasta la fecha continúa funcionando nuestra sede.
Habiendo logrado el lugar físico, se eligió la fiesta de la Asunción de la Virgen María para la inauguración. Así pues, el 15 de agosto de 1974 con la presencia de nuestros padrinos y miembros del Servicio Sacerdotal de Urgencia de la diócesis de Bahía Blanca e integrantes de nuestras guardias, familiares y amigos, monseñor Pironio celebró la misa de inauguración en la Iglesia Catedral, pronunciando una sencilla pero conmovedora homilía, haciendo resaltar la importancia del servicio que se iniciaba en favor de los enfermos de nuestra comunidad.
Por la noche, en la capilla de la sede monseñor Pironio, procedió a bendecir las instalaciones y a la reserva de la eucaristía en el Sagrario. A continuación abrió la primera guardia, pronunciando una conmovedora oración a la Santísima Virgen María pidiendo su protección.
Es así que por cuarenta años, muchos han recibido la unción de los enfermos y la comunión de manos de algún presbítero de nuestro servicio, auxiliado por dos o tres guardianes que cubrieron esa noche la guardia del servicio, por amor dejaron sus familias para servir al que necesita ayuda espiritual. Pero no solo se llevan estos sacramentos, también se pide en la capilla del servicio por la salud física y espiritual o el eterno descanso de algún familiar o amigo, práctica habitual realizada en cada apertura de la guardia”, puntualizaron los miembros de esta pastoral caritativa.
Oficina de Prensa | Obispado de Mar del Plata