Ayer se sucedieron en inmediaciones de la cancha de Independiente, en la Estación Gerli del Ferrocarril Roca, en el Obelisco y en la cancha de Estudiantes de Caseros, donde Gimnasia y Esgrima La Plata enfrentó a Liniers por la Copa Argentina.
En los primeros de los hechos barras que disputan el liderazgo se enfrentaron sobre las vías del tren a pocos metros del estadio y cuando faltaban varias horas para la disputa del partido entre Independientes y el Deportivo Ceará por la Copa Sudamericana. Allí hubo 163 detenidos y luego del partido hubo insultos generalizados contra la conducción de Hugo Moyano
Otro caso de suma gravedad ocurrió en Caseros, donde hinchas de Gimnasia no pudieron ingresar a la cancha y se cerraron las puertas del estadio. La policía debió apelar al uso de gases lacrimógenos para dispersar a grupos que intentaban acceder por la fuerza. Fueron dramáticas las escenas de los jugadores platenses alcanzando botellas de agua a los afectados por el gas pimienta como se denunció.
El partido debió ser suspendido por varios minutos y en la previa ya se habían producido incidentes cuando se agotaron las entradas en La Plata, aun cuando se había dispuesto que el partido iba sin público, aunque también hubo simpatizantes de Liniers en la cancha alentado a su divisa.
En hecho restante un grupo de hombres identificados con los colores de Racing, agredieron a simpatizantes de Deportivo Cali que hoy enfrentará a Boca. Se secuestraron facas y otros elementos, siendo detenidos dos autores de las agresiones.
Lo impactante es que no sólo la violencia se produce entre fracciones adversarias, sino que también las barras disputan sus internas en tribunas y adyacencias portando armas blancas y hasta pistolas. Las zonas de estacionamientos se han convertido en áreas de peligro y los controles parecen haber desbordado al APREVIDE, que permitió la presencia de público de ambas parcialidades en Caseros, donde se enfrentaron Gimnasia y Liniers.
EN CASEROS
Gimnasia se midió ante Liniers, por los 32avos de final de la Copa Argentina, pero el encuentro empezó a jugarse antes en los escritorios del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires y de APREVIDE que en la cancha de Estudiantes de Caseros.
Los organismos de seguridad decidieron suspender la presencia de hinchas en el encuentro, cuando los simpatizantes Triperos ya acampaban el lunes por la noche en el Bosque para hacerse de una entrada el martes por la mañana.
Rápidamente la dirigencia del Lobo pidió ante Torneos, empresa que organiza la competencia, postergar y al tener la aprobación de Liniers, el partido se postergaba. Pero el martes por la mañana finalmente desde seguridad dieron consentimiento para que el partido se juegue como estaba estipulado: ayer a la tarde en la cancha de Estudiantes de Caseros.
Hasta allí se llegaron miles de hinchas de Gimnasia, quienes colmaron los 8 mil lugares que tenían disponibles para acompañar al equipo que dirige Néstor Gorosito en el debut de la Copa Argentina. En el camino debieron soportar el maltrato de la policía.
Pero el partido debió ser interrumpido cuando el encuentro promediaba los 32 minutos cuando un hincha Tripero pidió asistencia, lo ignoraron y ante la reacción de varios que estaban en el sector, policías decidieron cerrar la puerta.
Varios simpatizantes quedaron fuera de la cancha, otros corrían de un lado para el otro y efectivos policiales empezaron a reprimir con gas pimienta. Ante esta situación, Rodrigo Rey y Brahian Alemán se subieron al alambrado y pidieron ayuda. Así fue como desde el cuerpo médico Albiazul se acercaron al sector.
EN INDEPENDIENTE
Independiente enfrentó anoche a Ceará en lo que era un partido clave para sus aspiraciones de clasificar a la próxima instancia de la Copa Sudamericana. Sin embargo, la previa se vio manchada debido a que la barra del Rojo volvió a protagonizar un hecho de violencia que terminó con heridos, según testigos y algunas filmaciones, hubo piedrazos y balas de goma. Finalmente, los lamentables incidentes terminaron con dos efectivos heridos y, hasta el momento, 163 detenidos.
Cabe recordar que Independiente ya venía viviendo días convulsionados por la interna de la barra. Los Diablos Rojos, grupo encabezado por Bebote Álvarez, tiene la intención de retomar el control que hoy por hoy está en manos de dos grupos, Dueños de Avellaneda y Somos Nosotros.
En Gerli Barras de Racing contra colombianos
Los hechos de violencia provocados por la barra de Independiente no fueron los únicos en el día. Un ataque de barras bravas de Racing a hinchas de Deportivo Cali causó pánico en la estación de Gerli del Tren Roca: se registraron seis heridos -todos de nacionalidad colombiana- por cortes. Uno de ellos, en estado grave.
El hecho estaría directamente vinculado al robo de una bandera: según informó el periodista Gustavo Grabia, la semana pasada, colombianos robaron un trapo del Cilindro, en la previa del duelo entre la Academia y Melgar por la Copa Sudamericana. Luego de que la barra de Deportivo Cali difundió un video en redes sociales, Los Pibes de Racing -como se conoce a la barra brava- juraron venganza.
