En las últimas horas el caso de la joven fallecida Lucía Pérez, volvió a cobrar importancia ya que el forense encargado de analizar la prueba del expediente agregó más confusión a la muerte de la menor, aclarando que la adolescente perdió la vida debido a una asfixia por sofocación, dejando de lado la sobredosis y el reflejo vagal, que fueron las hipótesis presentadas desde un principio.
La fiscal que interviene en el caso María Isabel Sánchez, recibió la información del forense Adalberto Bonvicini, quien señaló que la joven murió por asfixiada por sofocación y presume que tuvo reducida su conciencia debido a un importante consumo de cocaína.
Asimismo, el informe no descarta que la menor haya sido forzada a tener relaciones sexuales mientras estaba bajo los efectos de estupefacientes, pero hasta el momento no existen demasiadas precisiones sobre el hecho.
Es de destacar que la fiscal que intervienen en la causa, cree que hubo un caso de abuso sexual seguido de muerte a la cual le agregó el homicidio “criminis causa”. Según Sánchez, los autores del hecho (los tres detenidos) asesinaron a la adolescente para obtener impunidad a partir del delito de consumo y violación.
Con estos datos la fiscal deberá analizar las pruebas para elevar la causa a juicio oral o porque no cambiar la calificación de la misma.
Los tres imputados: Matías Farías, Juan Pablo Offidani y Alejandro Maciel, este último acusado de “encubrimiento agravado”, permanecen alojados en el Penal de Batan. Según la investigación se presume que tanto Farías como Offidani estuvieron con la menor en la casa del primero y luego Maciel intervino para trasladarla a la sala de salud de Playa Serena, una vez que Lucía había fallecido.