Luego de confirmarse que el vino no tendrá aumento de impuestos, tal como lo estipulaba inicialmente la reforma tributaria, la cerveza seguirá los mismos pasos. La alícuota se mantendrá en el 8% y no se elevará al 17%, de acuerdo con La Nación.
La Cámara de la Industria Cervecera Argentina había elevado sus críticas al conocerse los cambios que buscaba impulsar el Gobierno, pues si se aplicaba la suba de impuestos, eso llevaría a incrementar un 6% sus precios.
“La industria está estancada en los últimos años. A pesar de esto hay un compromiso 2016-2020 de US$ 1800 millones en inversiones. Sin embargo, con estas medidas, las empresas socias están revisando sus planes”, había advertido Alejandro Berlingeri, director Ejecutivo de Cerveceros Argentinos.
Según sostuvo Berlingeri, durante 2016, el consumo per cápita fue de 41 litros, uno de los números más bajos en los últimos 10 años. Para el representante del sector de cervecerías industriales, el impuesto era “una discriminación” e indicó que “hoy tienen cerca del 52 % de impuestos y con esto hubiesen llegado a casi el 58 %”.