EDEA detectó dos nuevos casos de fraude eléctrico en un local de elaboración de pastas, sito en la calle Estrada al 5.700 y en un polirrubro, ubicado en las inmediaciones de 11 de Septiembre y Catamarca. En ambos casos los comercios eran alimentados a través de conexiones directas que evitaban que el consumo de energía fuera registrado por los equipos de medición.
Con un importante despliegue de personal en diferentes arterias de la ciudad, EDEA llevó a cabo durante la última temporada de verano un amplio relevamiento de equipos de medición y de instalaciones en general, habiéndose inspeccionado más de 6.000 suministros eléctricos.
A través de su personal del Area de Normalización de Pérdidas, la Compañía desarrolló un intenso accionar contra el fraude eléctrico tanto en horarios diurnos como nocturnos, mediante operativos de verificación sistemática (barridos), o por actuaciones planificadas y direccionadas, fruto del análisis de datos suministrados por el sistema informático de la Empresa.
En todos los casos, la Empresa labró las actas correspondientes, que dieron origen a las acciones comerciales y legales pertinentes. Cabe destacar que una vez detectado el fraude, EDEA está facultada a cobrar con una retroactividad de hasta cuatro años la energía consumida y no registrada, en base a una estimación de consumo que se realiza según sea el ilícito cometido.
