Tanto las instituciones que impulsan el proyecto de creación del Registro de Pequeñas Unidades Productivas Alimenticias (RePUPA) como los sectores empresariales y gremiales que objetan la iniciativa y en representación del Departamento Ejecutivo, el Secretario de la Producción Mariano Pérez Rojas, y el Director de Bromatología Dr. Mario Gómez, fueron convocados a participar en la reunión de la Comisión de Promoción y Desarrollo que se llevara a cabo, este lunes, a partir de las 11.
Asimismo se les envió copia del último proyecto de ordenanza presentado con sus anexos para intentar destrabar el tratamiento del polémico expediente.
Si bien la Mesa de Economía Social, a través del edil de Acción Marplatense Fernando Gauna, aportó una propuesta modificatoria en función de dar respuestas a las objeciones, que obstruyen el avance del expediente, en la última reunión de la Comisión, que se llevó a cabo el martes de la semana pasada, se sumó un nuevo actor reciclando los mismos temores.
Por un lado las modificaciones, que se aportaron al debate, se centran en el número de integrantes de cada Pequeña Unidad Productiva Alimenticia, dejando establecido que puede tener un máximo de tres. Se incorpora una doble restricción a la posibilidad de comercializar por cuanto se establece que cada PUPA podrá vender sus productos a un máximo de cinco establecimientos. Y cada uno de éstos, a su vez, solo podrá comerciar con cinco PUPAs. Además, se lleva de 30 a 90 días el plazo máximo de reglamentación de la ordenanza.
También se adjuntó al expediente, una nota de apoyo a la creación del controvertido Registro de Pequeñas Unidades de Productos Alimenticios por parte la ONG Sol de Mayo, que lleva más de ocho años acompañando y fortaleciendo emprendimientos de la economía social y solidaria, a través de financiamiento, asesoramiento, capacitación y generando herramienta para la comercialización y el desarrollo de los mismos.
Pero por otra parte, se agregó la presentación efectuada por la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Mar del Plata y Zona (AEHG) que solicitó sumarse a la discusión, expresando su preocupación ante la eventualidad de “una mayor competencia de nuevos actores a partir de obtener la legalidad se puedan transformar en competencia desleal si no cumplen con los mismos requisitos exigibles a nuestros asociados”.
La Comisión accedió a este requerimiento e inclusive permitió que el tesorero de dicha entidad, Avedis Sahakian, que había concurrido a la reunión, en calidad de oyente, tuviese la oportunidad de aclarar que “el 90% de los miembros de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica son pequeñísimas rotiserías, casas de empanadas y de té así como confiterías pequeñas también, en las que trabajan padres, hijos y familias enteras dentro de la ley y las ordenanzas vigentes”.
Al igual que la UCIP, el Centro y la Asociación de Industriales Panaderos y la CGT, el representante de la AEHG volvió expresar el temor que “al generar las PUPAs generarían una competencia desleal con ellos porque el fisco nacional, provincial y municipal a las empresas que tienen un mostrador abierto a la calle le hace una serie de exigencias tremendas y esas pequeñas empresas las cumplen, y ustedes al generar esto, están generando una vía de escape que no va a favorecer el trabajo, va a ir en contra porque las empresas que están establecidas, especialmente las más pequeñas se van a ver menoscabadas en sus mercados terriblemente”.
Así las cosas, las expectativas cifradas en la convocatoria multisectorial girarán en torno a la posibilidad de avanzar en el tratamiento del polémico expediente, exorcizando los temores manifestados por los sectores empresarios y gremiales, ligados a la industria panificadora y a la gastronomía.
Roberto Latino Rodríguez
