Con el correr de las horas se fueron conociendo algunas precisiones sobre cómo se desarrolló la secuencia del doloroso episodio que terminó con la vida del padre y su hijo.
Lucas ingresó a la vivienda del barrio de Villa Gaucho y se encerró en una de las habitaciones. Demasiado angustiado por la difícil situación personal por la que atravesaba, estaba decidido a poner fin a su vida. Pero antes habría enviado un mensaje a través de su celular a la mujer con la que tenía un hijo, pero con la que las cosas no estaban para nada bien.
Ese mensaje habría sido reenviado por la joven a la hermana de Lucas y ésta puso en alerta a su padre, Daniel, que raudamente abandonó su puesto en el diario La Voz rumbo a su casa.
EL DESENLACE
Cerca del mediodía Daniel Pérez ingresó a su casa de calle Las Malvinas, entre Rosales y Darragueira. Fue hacia la habitación, llamó varias veces a Lucas, pero al no obtener respuesta ingresó por la fuerza violentando la puerta.
En un acto desesperado quiso evitar que su hijo -que ya estaba con su arma reglamentaria sobre la sien derecha-, efectuara el disparo, pero la pistola se accionó; y ya la cercanía de ambos cuerpos hizo que la bala, tras quitarle la vida a Lucas, siguiera su dirección e impactara en uno de los ojos de Daniel, provocándole la muerte en forma instantánea y accidental, según revelaron fuentes de la investigación a este Portal de Noticias.
LA ESCENA
En la habitación de la tragedia los investigadores hallaron el cuerpo de Lucas sobre la cama recostado sobre su izquierda con el arma al lado de su mano diestra. Daniel estaba sobre el piso, boca abajo.
Tras inspeccionar el lugar, los peritos de la policía hallaron una única vaina servida, de la bala que instantes antes había terminado con dos vidas.
Habida cuenta de que Tandil no posee médicos de policía, los cuerpos fueron trasladados a la morgue de Azul donde los forenses realizaron las operaciones de autopsia.
DOLOR
A medida que familiares, amigos y compañeros de trabajo de las víctimas se fueron enterando de la tragedia, se acercaron al lugar donde se vivieron escenas desgarradoras de inmenso dolor y consternación.
Daniel y Lucas serán velados a partir de esta medianoche en Casa Crespo, Iacaruso y Santillán (Av. Avellaneda 1.323) y sepultados el viernes a la hora 10 en el Cementerio Municipal.
Fuente: abchoy.com
Resulta raro que La Capital no haya publicado ni una línea sobre este episodio, siendo que el diario La Voz de Tandil es propiedad del gallego.