Cansados por la falta de respuestas por parte de legisladores y el continuo accionar delictivo de personas que usurparon terrenos ajenos en Estación Camet, uno de los damnificados se comunicó con nuestro portal para expresar su desencanto con respecto a este tipo de maniobras que no hace otra cosa que apoderarse de lotes con total impunidad.
Emilio Nilo Suárez es una de las víctimas de estos sujetos que actúan de manera singular: “para un automóvil y con los datos precisos comienzan a alambrar el lote de manera precaria”. Y añadió que “no es gente de bajo nivel económico en más bien de clase media y en algunas oportunidades traen un agrimensor”.
Suárez que toda una vida residió en el lugar, mostró su marcado descontento para con la situación y manifestó: “hay 600 lotes en el lugar aproximadamente de los cuales el 8 % está usurpado y las zonas más afectadas son El Tejado, El Zoziego y La Laura”.
Con respecto a esta actividad delictiva Nilo aseveró que “esto comenzó en el verano del 2012. Luego la actividad se acrecentó ya que hay muchos familiares que no saben que disponen de un terreno en la ciudad o en su defecto sus herederos no habitan en la ciudad”.
En el caso específico de Nilo una pareja usurpó sus lotes 28 y 29 manzana 42 (así figura en el plano original del loteo de Estación Camet); “en solo seis meses edificaron sin importarles nada. Les presenté la documentación necesaria para fundamentarles que había un error pero no me escucharon solo mostraron un boleto trucho y parece que con eso alcanzó”.
No obstante Suárez presentó una nota ante el Defensor del Pueblo pero no tuvo éxito. Luego hizo lo propio en prensa de la municipalidad hace unos 25 días pero en carácter de denuncia (número de Legajo 5320/5) y hasta el momento no recibió noticias.
Existen dos modalidades diferentes que utilizan los usurpadores una es la Usucapión* y la otra es el boleto apócrifo.
Indignado por su situación personal y la de varias familias damnificadas por estos sujetos, Nilo aclaró que “lo ideal es que venga un fiscal y que constate o pida los elementos necesarios a los usurpadores, para de esa manera comprobar la autenticidad de las propiedades”. Y agregó: “la información de estos terrenos solamente la manejan funcionarios municipales no se consigue en internet”.
Asimismo el damnificado concluyó que “el abogado que maneja nuestra causa es el Dr. Diego Barrutia”. Y continuó: “dio positiva la pericia caligráfica del Boleto Compraventa que se efectuó en 1987. En aquel entonces me dieron la posesión de ambos lotes que hoy fueron usurpados”.
*Usucapión: es la institución del derecho civil por la que quien poseyó un terreno, una casa o un departamento durante cierto tiempo establecido por la ley, se le premia haciéndolo dueño de esta.
No será el caso del usurpador, no es el caso de quien se mete a una casa y allí se queda, no es el caso del inquilino eterno, no. Es el caso de quien luego de haber tenido “animo de poseer” la misma cierto tiempo, y la ha cuidado y tratado como propia, ha quedado a las claras revelado su íntimo deseo de poseerla.
La gravedad del caso no es solamente por el hecho en sí de usurpar un terreno, sino además por la evidente cadena de complicidades entre funcionarios del Estado, llámese Delegación Municipal, Dirección de Catastro, Defensoría del Pueblo, etc., con la participación de abogados, escribanos y empresarios inmobiliarios.
Se dice allí que el precio promedio que pagaron los okupas es de 10.000 por lote. ¿Quién los cobró? ¿A manos de quiénes fue a parar el dinero?
Es un tremendo caso de corrupción y delitos que debería ser investigado a fondo.
Esperemos que algún concejal se ponga las pilas y accione debidamente, al menos con un pedido de informes y la intervención de la Justicia, si es que algún rinconcito de honestidad aún queda en el sistema corrupto que padecemos.
Es así Néstor. El problema es más profundo por eso nos comprometimos a seguir tratándolo si no lo solucionan en tiempo y forma.
Es grave el tema, sí, muy grave. Si el promedio de venta ilegal de lotes ajenos es de 10.000 pesos cada uno, multipliquemos por los centenares (si no son miles) de terrenos usurpados no solamente en Estación Camet sino en el Bosque de Peralta Ramos, Sierra de los Padres, Alfar, Faro Norte, Playa Serena, Punta Mogotes, Colinas de Peralta Ramos, y los barrios ubicados entre el Parque Camet y el Gada 601.
Esa multiplicación nos daría cifras monstruosas, dándole al delito de la apropiación de inmuebles una proporción tremenda.
Y sin embargo, ni las autoridades municipales ni las judiciales hace algo para terminar con esta aberración.
¿Habrá, entonces, que desalojar a los intrusos a balazos por parte de los damnificados?
María Julia: sería una posibilidad pero no creo que sea la más acertada. Lamentablemnete miran para otro lado y nadie se hace cargo del tema como es debido.