A modo de homenaje, esto escribía mdphoy.com el lunes 23 de agosto, a un día de ser reconocido por el HCD:
“…su relación con el espectáculo que data de comienzos de la década del 60. Por entonces se inició junto a su padre como asistente del Cine Club Forum participando, al mismo tiempo, de un juvenil equipo de cortometrajistas. Luego, decidió formarse actoralmente y participó del taller del maestro y director Agustín Alezzo.
Esto lo llevó a trabajar en la televisión en diversos programas, aunque decidió seguir abocado al mundo del espectáculo pero desde otro lugar: así se involucró en la producción y fue el encargado de más de sesenta puestas teatrales. Esto lo llevó a recibir innumerable cantidad de premios y reconocimientos que, sobre todo, hicieron hincapié en su don de personas.
Ya como director del Teatro Colón conformó una oferta de aproximadamente 480 funciones durante el año, alcanzando la utopía de tener alrededor de 40 funciones mensuales y con actividad durante los 365 días del año. Así, este espacio se abrió para todos los públicos, para locales y también para los turistas, convirtiéndose en un epicentro cultural de la ciudad.
Además le da albergue a expresiones como la Orquesta Sinfónica, la Banda de Música y la Orquesta de Tango, todos ellos organismos musicales municipales, y espectáculos de teatro, expresiones de danza clásica, moderna y contemporánea, ciclos de cámara, conciertos líricos, sinfónicos y de música popular, espectáculos de humor, de jazz, de folklore, entre muchas otras propuestas”.
Esto decía Willy cuando fue reconocido por el HCD:
“Tendría que ser un mago muy especial para considérame el padre del teatro Colón, pero haber parido algo que tiene que ver con el teatro si me siento padre, pero no desde su trayectoria”.
Sintiéndose orgulloso de que Mar del Plata y tenga este Teatro, Wullich se mostró mas que satisfecho. “Estoy feliz, pero no vivo de reconocimiento político, y sin que lo tome a mal ninguna autoridad, me llena profundamente la correspondencia de la gente”, manifestó. Y prosiguió con que “pero sin lugar a dudas esta gratitud es una caricia al alma”. “Pero el agradecimiento está en la calle”, insistió.
Claro está que es fidedigno reconocimiento espontáneo de la gente por la calle. “Es genuino y con una cuota de amor. Por la calle me gritan y me dicen que no he perdido el entusiasmo de hacerlo como el primer día”, enfatizó.
Con las puertas abiertas a la cultura, y respirando arte por doquier, Willy se regocija en la tarea de Director. “Es grato, es difícil en tanto y en cuanto de nuclear a todos los que quieren subirse a este escenario porque la demanda es mucha”, expresó. Y mas adelante acentuó que“es hermoso escuchar, por parte de los artistas, el prestigio que da este Teatro a la hora de querer integrar la grilla”.
Agradeció a los duendes del Teatro que entre los artistas y la el público generan un espíritu mágico. “Aquí hay algo superador del hecho artístico, un ida y vuelta de la platea al escenario. El público viene entregado a que en el Teatro Colón ocurrirá algo mágico que los va a emocionar y esto se da en una suerte de parábola. Es estar en tu casa viviendo a pleno un espectáculo. Es algo raro de explicar, pero los duendes del Teatro generan mucho de todo esto que ocurre”.
En su tarea, sin denotar un símbolo de pertenecía en un principio, Willy remarcó como su peor transe cuando “los trascendidos indicaban que el Teatro cerraría sus puertas después del gobierno del Intendente Elio Aprile”. Sin embargo, dándole aire a la cultura, Wullich resaltó que “lo más significativo fue el apoyo de todos los artistas y del personal del Teatro para poder salir adelante, fue un gesto solidario muy importante que nos re energizó a todos”.
“Hoy recuperamos lo sembrado”, finalizó subrayando.
(Declaraciones: Gentileza El Retrato de Hoy).
