Un total de 30 motos y 7 autos secuestrados fue el saldo de lo actuado esta madrugada por la Dirección de Tránsito en la zona de Playa Grande, donde se realizaban picadas ilegales según indicaron desde la propia dependencia. Además se procedió con y una camioneta cuyo conductor estaba borracho.
El operativo, denominado “cerrojo” por las autoridades de Tránsito, contó además con la colaboración de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y de la Policía Bonaerense. Ese sector de la ciudad es habitualmente utilizado con ese fin, lo que motivó la denuncia de los vecinos por ruidos molestos, entre otras cuestiones.
Según se informó, el operativo se realizó de manera “sorpresiva” y la mayoría de los motociclistas eran jóvenes. Estas carreras, denominadas “picadas”, se realizan en una zona que es de tránsito para toda la ciudadanía originando serias complicaciones para el resto de los conductores.
Si bien las motos y los autos estaban participando de manera activa o como espectadores de estas competencias, además se secuestró una camioneta porque su conductor estaba en evidente estado de embriaguez. Efectivamente, los controles de alcoholemia continúan realizándose.
Tránsito y la Agencia Nacional de Seguridad Vial tienen bastante trabajo en la ciudad: durante el último fin de semana largo hubo más de 60 secuestros. Mientras tanto, se preparan para lo que serán los operativos que se realizarán durante las noches de hoy y mañana durante un nuevo fin de semana.