Por sus playas amplias y sus atardeceres, Necochea es uno de los destinos favoritos para vacacionar. Acostumbrada a recibir turistas no solo en verano, sino también en Semana Santa, durante las vacaciones de invierno y algún que otro fin de semana largo, desde el 20 de marzo, esta localidad balnearia se había vuelto una ciudad fantasma.

“A la mañana, estuvo muy tranquilo hasta el mediodía, con gente caminando pero muy espaciada. En la playa del centro, había un poquito más de gente. Después del almuerzo, entre las 14 y las 16, estuvo un poco más cargado. Era obvio: luego del almuerzo hace más calor, pero estuve hablando con un montón de personas que estaban contentas”, contó Arturo Rojas, intendente de esta ciudad donde los únicos tres casos positivos de COVID-19 ya fueron dados de alta.

En declaraciones ante el medio local Cuatro Vientos,Rojas destacó la responsabilidad con que la ciudadanía asumió las salidas. “La gente, sobre todo los chicos, estaban contentos. Precisaban una recreación porque fueron cincuenta días sin salir ni a la vereda. Fue bueno, fue muy positivo. El lunes vamos a evaluar lo que pasó: la idea era hacerlo solamente por el fin de semana”, sostuvo.

En Pinamar, el intendente Martín Yeza autorizó las salidas de esparcimiento durante una hora al día y en horarios según la edad, pero la playa sigue prohibida al igual que en Villa Gesell. Según Yeza, tomaron la decisión de peatonalizar algunas calles y avenidas para ampliar el espacio público y así evitar la concentración de gente que normalmente tiene la ciudad en la zona céntrica.

“Además, buscamos disminuir el tránsito vehicular para incentivar el uso de la bicicleta”, explicó desde su cuenta de Twitter.

De acuerdo con la información que brinda la página del Municipio de Villa Gesell, los habitantes de la ciudad podrán realizar breves salidas de esparcimiento, en beneficio de la salud y el bienestar psicofísico, sin alejarse más de quinientos metros de su residencia, con una duración máxima de sesenta minutos y hasta las 17 horas. La playa, hasta el momento, está prohibida.

Tal cual expusieron Mauricio Andersen y Cristian Angelini, secretario de Seguridad y jefe de Gabinete de Villa Gesell, el horario límite para los comercios y de circulación en la vía pública seguirá siendo hasta las 17.30. A partir de ese horario, se incrementan los operativos de control en conjunto con agentes de Tránsito, Seguridad y Policía.

Por último, Angelini recordó que a partir de este lunes comienza a circular el servicio público de transporte en el horario reducido de 8 a 16 horas, en el que se deberá cumplir con un protocolo especial que incluye el límite del 50% de la capacidad de pasajeros, ventilación y la desinfección de manos al ascender a la unidad.

“Quiero agradecerles a todos los marplatenses por el respeto y la responsabilidad en la primera jornada de la prueba piloto. Este mismo comportamiento es el que nos permitió llegar hasta acá y nos habilitó a tomar la decisión de reactivar de a poco la economía en nuestra ciudad”, sostuvo Guillermo Montenegro, intendente de Mar del Plata vía Twitter.

Al igual que otras ciudades de la Costa Atlántica, este fin de semana entre las 9 y las 17, La Feliz hizo un ensayo para que los comercios minoristas de la ciudad puedan abrir sus puertas cumpliendo con distintas recomendaciones sanitarias, como por ejemplo, capacidad máxima de personas dentro de cada local y el uso de tapabocas y de alcohol en gel.

Por otro lado, se reforzó el control de la circulación vehicular con fuerzas de Seguridad y personal del Municipio en la calle. Además, a través de las cámaras del Centro de Monitoreo se coordinaron y controlaron distintos operativos en zonas comerciales, espacios públicos e ingresos a la ciudad. ¿El dato color? Gracias a eso, se detectó a una persona que estaba paseando por Playa Grande y se le hizo una multa porque, al igual que en Villa Gesell y Pinamar, Mar del Plata no abrió sus playas todavía.

Al final del domingo, Montenegro sostuvo que en la semana analizarán cómo se desarrolló el “ensayo” y que, como estaba previsto, “los comercios minoristas de bienes no esenciales todavía no podrán abrir sus puertas”.