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En campaña electoral además de comprometerse a no habilitar las plataformas Uber y Scabify ante taxistas y remiseros, también dijo que iba a instalarse en el COM, como una señal de garantizar seguridad a los marplatenses. Pero hay malas noticias ni una cosa ni la otra.
La membresía judicial lo estimula y recibe a uno de los suyos, es de su palo y cree moverse como pez en el agua. El intendente Guillermo Montenegro es un adicto a judicializar los temas cuando no los resuelve desde la política. Una vez más quedó expuesto.
El conflicto de los taxistas y remiseros, por las habilitaciones de las aplicaciones Uber y Scabify ahora obra en la Unidad Fiscal de Delitos Económicos N º 10, a cargo del doctor Norberto Pizzo, Juzgado de Garantías nº 6. La denuncia por incumplimientos de los deberes del funcionario público fue presentada por el doctor Néstor Fernando Herrera.
Ya ocurrió en el tema de la exploración petrolera, en los cortes de calles y avenidas, en reclamos administrativos de distinta índole y en el juzgado Contencioso Administrativo obtuvo un fallo adverso sobre un direccionamiento de la licitación pública para el tratamiento de los residuos en el predio de disposición final.
En su posición en torno a las off shore desfilaron Javier Iguacel, Emilio Apud y Juan José Araguren, lo atendieron mal, cuestionándole su posicionamiento que lo acercaba a organizaciones que plantean desde las antípodas la misma problemática, y hasta hablaron de obrar con desconocimiento.
En el tema de las fotomultas sorteó al Concejo Deliberante y también desconoció un dictamen del Tribunal de Cuentas. Es una modalidad que ha implantado y que le permite gobernar sin los controles que establecen ordenanzas, reglamentaciones y leyes en vigencia.
Existe una adicción a plantear en el terreno judicial lo temas que no resuelve la política y cuyos costos se prolongarán más allá de la duración del presente mandato del doctor Guillermo Montenegro. Es como patear las dificultades propias de la gestión para que la suerte se juegue en los ámbitos de la justicia, justamente, y no es casual, la raíz de Montenegro.
NOTAS VINCULADAS
El acta compromiso que Montenegro no cumplió y provocó la reacción de taxistas y remiseros
Ah pero Macri, esta vez sí: Compró el relato del Gordo Montenegro
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