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Un momento de extrema singularidad se vivió en la aceptación de la frustrante derrota de Juntos por el Cambio para la Intendencia de Córdoba Capital, cuando el candidato Rodrigo de Loredo, apoyado extrañamente tanto por Patricia Bullrich como por Horacio Rodríguez Larreta, aceptó la derrota aún antes de conocerse ni siquiera el 1% de los votos escrutados en el recuento provisorio, y además lanzó una frase reveladora e impactante como disculpas a los precandidatos nacionales de la principal fuerza opositora, al decirles en el escenario la frase más retumbante de la noche: “Los hice venir al pedo“.
Es que en un gesto hasta ahora inédito, la foto que los dirigentes nacionales esperaban para subirse a una victoria en una elección municipal que ellos mismos (a través de la señal de noticias del diario La Nación), se encargaron (justamente) de nacionalizar, no sólo no se les pudo dar, sino que mostró como la improvisación, y el creer en las encuestas que el propio espacio manda a realizar, podía hacerlos dormir tranquilos en los laureles, y confiar en ‘unirse’ al menos para colgarse la cocarda de “vencedores” al unísono, ambos contendientes de la interna del PRO y el radicalismo de JxC.
También Martín Lousteau, quien la semana pasada se mostró ufanoso en Santa Fe, frente al triunfo de su “pollo” Maximiliano Pullaro, esta vez debió morder el polvo de una durísima caída electoral de otro de sus “mimados”, como es Rodrigo De Loredo, que además dejó esa imagen de caras largas y apesadumbradas tanto en Patricia Bullrich, como en Horacio Rodríguez Larreta, y ni que hablar en los periodistas de LN+, Luis Majul y un ‘envenenado’ cordobés Pablo Rossi, quien no hacía más que distribuir culpas a la coalición opositora por el mal manejo de las circunstancias electorales.
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