A diario, son cientos los chicos y chicas que realizan en la ciudad de La Plata el trabajo de repartir pedidos sobre sus motos, o también, en mucho de los casos, en sus bicicletas. Siendo éste su único ingreso económico, en una actividad que en enero presenta mayor inestabilidad que en el anterior mes. Los Rappi, como se los conoce, y quienes responden a los pedidos de las aplicaciones mas conocidas, como Rappi y Pedidos Ya, también son victimas de la actual crisis.
Su ‘día a día‘ en el verano platense
Debido a la situación de inflación que atraviesa el país, bajó el consumo en general, y en consecuencia, el trabajo de quienes realizan la entrega de pedidos, cayó también. Así lo expresaron varios de los testimonios consultados este viernes en el móvil de la mañana de LA CIELO. “ La gente pide menos“, y también se suman, que muchos se ajustan y resuelven de otra manera cómo obtener lo que antes obtenían de manera práctica utilizando las apps. “Está todo parado”, dijo Juan, mientras esperaba la notificación de algún pedido, en la esquina de 8 y 50.
Si bien es habitual que en enero baje el movimiento comercial, debido a una menor cantidad de gente circulando en la ciudad, este enero 2024 en particular, puede que esté aún más por debajo de ese porcentaje que todos los años desciende, y podría afirmarse, según lo que desprende de los propios repartidores, que su razón es puramente económica.
“El trabajo viene medio parado, antes sacábamos 7 u 8 pedidos, ahora estamos sacando 2 o 3 envíos por día, está demasiado parado”, detalló Juan. Según éste, y otros testimonios, en estas últimas semanas, y en comparativa con diciembre último, no solo han notado cambios en la cantidad de demanda, sino una variable significativa en aquello que solía pedirse, visible en pedidos que solo se reducen a envíos de desayunos, comidas rápidas o helados. “Antes los pedidos, también podían ser del ‘Club de la Milanesa’, pastas, pedidos de farmacias. Todo eso ya bajó demasiado a lo que era antes”.
En la actualidad, al cliente el pedido le sale 2000 pesos, pero éste se reduce a poco más de la mitad cuando llega al bolsillo del repartidor, con lo cual tener al final de una jornada, ‘un buen día de trabajo‘, implica, sí o sí, haber realizado muchos repartos. “ A nosotros nos queda más o menos mil y pico por pedido. Hoy, por día gano entre 7000 y 8000 pesos. Depende de cómo se haya trabajado”, agregó Juan.
A un ingreso estimativo de 7000 pesos en el final de una jornada, se le deben descontar gastos fijos, y posibles imprevistos. “Se le descuenta aproximado 3000 pesos de combustible y crédito del celular”. En el caso de los trabajadores que reparten en bicicleta, si bien, no descuentan para el combustible, puede que al final de su turno, sea menor la cantidad de envíos entregados, a comparación de las motos que llevan pedidos a distintos puntos de la ciudad. Menos gastos para los repartidores en bici, pero, quizá con una menor cantidad de entregas al final de un día de trabajo.
“Desde las fiestas bajó todo”
“El trabajo viene medio muerto”, expresó abiertamente Diego, otro repartidor, ante la consulta del móvil de La Cielo. Según él, quien todos los días trabaja 8 horas haciendo repartos, el declive comenzó a fin de año, en paralelo con las fiestas en el cierre de diciembre. “Desde las fiestas bajó todo. Creo que ahí la gente se dio cuenta que no hay plata, y que la que hay, está para vivir todos los días, no van a estar gastando en delivery. Antes se hacían más compras, ahora es solo comidas”.
En su caso, llega a entregar un promedio de 12 pedidos, pero igual nota la baja en la demanda en la comparativa con anteriores semanas. “En las 8 horas gano entre 7000 y 8000. A eso le descuento 2000 de nafta, 2500 para comer, por lo que estoy viviendo con 4000 al día”, expresó Diego, algo resignado. “La mayoría estamos así, viviendo el día a día”.
Además del consumo de combustible para sus motos, los chicos repartidores deben incluir en sus gastos el pago del seguro, el mantenimiento, y demás gastos extras que puedan surgir ante cualquier imprevisto o desperfecto en su moto.