En el caso de la bebé de tres meses que murió ayer y que provocó un escándalo en la localidad de Ayacucho por la denuncia de la madre que decía que la habían matado unos ladrones, la autopsia confirmó que la causa de muerte habría sido un broncoespasmo, aparentemente producido por el propio vómito de la beba.
El intendente Darío David, enseguida salió a hablar a los medios, donde confirmó que “la autopsia dice que no había signos de haber sido agredida” por lo que estarían desconfiando de la madre. En principio, explicó que “no hubo ningún asalto porque los peritos llevados adelante hasta el momento no pudieron confirmar ni acercarse a ésta hipótesis”.
En tanto, los médicos forenses que trabajaron sobre el cuerpito de Antonia en la morgue judicial de La Plata, dijeron que “no hay lesiones violentas externas” aunque también dijeron que van a seguir analizando otras muestras.
Los investigadores también dejaron entrever ciertas dudas sobre la versión aportada por la madre (no faltan objetos, no hay testigos, si hay contradicciones) y creen que pudo haberse tratado de un caso de negligencia.
La principal sospecha que se trabaja es la posibilidad de que la beba se haya atragantado con su propio vómito.
Anoche unas 500 personas se volvieron a manifestar por el episodio, aunque ya todos los vecinos dudan sobre el hecho.
La mamá había contado que el ayer al rededor de las 15 tras amamantar a la bebe se había metido en la ducha y que cuando salió se encontró con dos delincuentes encapuchados dentro de su casa. Allí, uno de ellos le habría pegado una piña y como la beba no dejaba de llorar, la habría tapado con una manta.
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