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Juicio por abuso sexual, torturar y prostituir a ex parejas y violar a la hija de una de ellas: Prevén pena de 50 años

 

Comenzó en Mar del Plata el juicio a Christian Gilberto Bustos, acusado de haber prostituido a sus exparejas, haberlas golpeado, torturado y violado reiteradas veces a la hija de una de ellas.

Bustos está imputado por hechos que van desde la trata de personas con fines de explotación sexual, bajo modalidad de acogimiento, explotación económica del ejercicio de la prostitución, y abuso sexual reiterado y agravado por haber sido cometido contra una menor de edad, además de reducción a la servidumbre. De probarse los hechos, la pena que recibiría Bustos podría llegar hasta los 50 años de prisión.

Los casos de abuso sexual

El fiscal sostuvo que Bustos deberá responder como autor penalmente responsable de trata de personas con fines de explotación sexual, en perjuicio de una mujer que era entonces su pareja, en modalidad de acogimiento, que es la última etapa que conforma este delito. Según explicó, en estas circunstancias, abusando de la situación de vulnerabilidad que la atravesaba, y mediante violencias, amenazas e intimidaciones, el acusado sometió a la mujer a la prostitución, obteniendo un rédito económico a través de su explotación.

En el segundo hecho descripto, el acusado deberá responder como autor penalmente responsable del delito de abuso sexual agravado reiterado, en perjuicio de quien era entonces una adolescente, hija de la mujer sometida, aprovechando la situación de convivencia, en concurso real con el delito de reducción a la servidumbre, por haberla forzado a cumplir tareas domésticas, de manera coaccionada.

El tercer hecho tiene como víctima a otra mujer, anterior pareja del acusado, a quien habría explotado sexualmente para su beneficio económico, mediante violencia e intimidación. El representante del Ministerio Público Fiscal explicó que el vínculo entre ambos se había iniciado cuando la mujer era menor, y logró ponerle fin luego de “superar la dependencia y el miedo hacia el denunciado”, cuando logró abandonar el circuito prostituyente

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