
Por qué debería extrañar que nuevas concesionarias del estacionamiento medido apliquen algoritmo relacionado con el crecimiento exponencial del parque automotor en los últimos años, que las dársenas sean insuficientes en el radio de aplicación del estacionamiento, producto de los decks, la ciclovía y los minicontenedores de CIAGESER diseminados por toda la geografía marplatense. Muy bien podrán ir de la mano un aumento de la hora de aparcamiento y la ampliación de las zonas actuales, Güemes, Olavarría y Alem son tentadoras, a partir de un nuevo régimen de explotación del sistema.
Lo que se insinuaba como un traje a medida para tres oferentes con estrechos vínculos en el HCD y en el DE, sufrió un trastorno en una hoja de ruta complicada que el intendente Guillermo Montenegro ha tratado sistemáticamente de evitar, mediante la utilización de mecanismos de prórroga, declaración de emergencia, firma de convenios, decretos y hasta la instrumentación inédita en la MGP de un impuesto a la carga de combustible, que es resistida por anticonstitucional.
Hay que abordar la movida de los Gilardi boys, con antecedentes que son un reflejo en esta nueva experiencia que complica los planes oficialistas. En el propio bloque de JxC no estaban convencidos (pese a su mayoría propia) de la procedencia de los términos de la licitación. Hay demasiados grises en las fojas de expedientes recientes, como en el tema de las fotomultas, al cual no hay que darlo por cerrado por las condiciones en que se encuentra.
Señales titilantes para un intendente que no renueva y movimientos que adelantan diferenciaciones cuando hay ausencias en el día a día para preparar otro desembarco político en otros lares. Transformó el “renovado” gabinete en una ampliación con los problemas propios de las familias ensambladas. No está unificada la conducción, esa es la cuestión de fondo.
El ensayo de crecimiento territorial ya tiene sus límites para el PRO de la mano de Montenegro que no se afincó pese a los sucesivas marcas con instalación de slongans. Un perpetuo sindicalista al mando del gremio talló frente a los incumplimientos que se reiteraron y quedaron expuestos a través de la incomodidad de los giros en descubierto. Los mismos que necesitan el guiño de Kicillof para pagar los sueldos desdoblados y horas extras.
El STM salió a cuidar la caja del estacionamiento medido que tiene un costo político muy grande para el intendente. Si crecen los hombres del camión del clan Moyano hasta convertirse en la segunda caja municipal, hay una clara postergación del clásico trabajador municipal. Le están extirpando aportes sindicales y obra social, en un tiempo nuevo en el cual la incertidumbre es excluyente.
En 2024 han vivido en estado de alerta y movilización o en paros activos, la tendencia es que la proyección del pago de los sueldos de marzo deba estirarse más allá de abril. No está pasando nada que no hay adelantado mdphoy.com casi con precisión de relojería.
El FESIMUBO audita la marcha de los 135 municipios bonaerenses. Y el monitor no arroja señales sanas de normalidad en torno a la ciudad más importante del interior de la Provincia de Buenos Aires. La gestión Montenegro es una llaga viva que debe cicatrizar con Milei en Balcarce 50 y con Axel en la gobernación: “ Está más cerca del arpa que de la guitarra”
Cuál es el balance: Que este segundo mandato de Montenegro será para consolidar los 10.000 planes sociales en blanco que los contribuyentes marplatenses sostienen a cambio de nada y en lo que se han convertido los planteles básicos de personal de la municipalidad, cuya política como tal ha sido destruida. ¿Cómo es el gráfico? “El cobro del sueldo es para concurrir al lugar de trabajo y el pago de horas extras es para trabajar” Así lo explican los propios jerárquicos municipales en funciones. Sólo falta agregar a confesión de parte relevo de pruebas.
¿Dónde fue a parar el 150 % de sobreprecio en las fotomultas y la diferencia de las cartelizadas licitaciones de la recolección y tratamiento de los residuos? ¿Quedan en Mar del Plata?
Ahora la preocupación llegó hasta el Sindicato de Trabajadores Municipales.
La MGP ha incurrido en una histórica desinversión urbana.




