«Bessent también reveló que trabaja junto al sector privado y fondos soberanos en una alianza que podría aportar una línea de crédito por US$ 20.000 millones adicionales al swap de monedas ya anunciado. Si el plan se concreta, el respaldo total alcanzaría los US$ 40.000 millones,» comentaron en PPI, a la vez que advirtieron: «Ni el swap ni el crédito incrementarían las reservas netas del BCRA, sí potenciarían de forma notable su poder de fuego. Con reservas líquidas estimadas en US$ 18.820 millones, estas ascenderían a US$ 38.820 millones con el swap, y hasta US$ 58.820 millones si se suma la nueva línea».
Ni el swap ni el crédito incrementarían las reservas netas del BCRA, sí potenciarían de forma notable su poder de fuego.
Los anuncios entusiasman al mercado pero no sirven, por ahora, para corregir la tendencia. Todas las cotizaciones en el mercado de futuros saltan, con el grueso del volumen concentrado en las de más corto plazo: los inversores buscan cubrirse frente a un dólar que supere los $ 1.500 en el mercado mayorista después de las elecciones.
Los bonos en dólares, que habían comenzado al alza la rueda, vuelven al sentido negativo. El riesgo país se mantiene por encima de los 1.000 puntos. (DIB)