Me cuesta mucho escribirles.
Cuando me propusieron asumir como obispo de Mar del Plata, agradecido por la confianza del Papa, me apresuré a aceptar enseguida, sin tomar conciencia , del proceso que estaba pasando. Hace varios meses que vengo luchanndo con un desprendimiento de retina, con dos operaciones y otra prevista para febrero (aparte de otras situaciones familiares y personales )
Cuando se publicó mi designación recibí tal avalancha de saludos, reportajes y recomendaciones que me di cuenta que no estaba en condiciones para asumir la misión allí.
Después de discernirlo mejor y consutarlo con la Santa Sede decidí presentar mi renuncia.
Podría haberlo dilatadola decisión unos meses, pero preferí hacerlo rápidamente para que pudieran contar con el obispo dioscesano cuanto antes.
Por mi parte, seguiré ofreciendo mi servicio sacerdotal en la Arquidioscesis en la que estoy .
Siento defraudar las expectativas , confío que este dolor se haga fecundo.
Agradexco los innumerables saludos, buenos deseos y la oración que nos mantiene unidos en el camino del Señor.
“Así como el cielo se abre sobre la tierra, así sobrepasan mis caminos y mis pensamientos a los caminos y pensamientos de ustedes dice el Señor ” (Isaías 55,9)
Unidos en este Misterio de Amor , los saludo de corazón e implorando sobre todo la bendición del Buen Dios y la protección de la Virgen.
José María Baliña
Obispo emérito de Mar del Plata.