Ciudad, Información General

Conmovedor relato de una mujer que participó del rescate de las orcas en La Caleta

blank
Foto: Ricardo Bastida

 

 Fabiana Sicco no dudó en acercarse a la costa cuando supo que los animales se encontraban varados. En las redes sociales, escribió una crónica detallada y se ganó la admiración de muchos.

El rescate exitoso de seis de las siete orcas que el último lunes encallaron en Mar Chiquita tuvo como protagonistas a los propios vecinosFueron hombres y mujeres del lugar los primeros en llegar a La Caleta para ayudar a los animales, a pesar de su falta de entrenamiento.

Una de ellas fue Fabiana Sicco, quien publicó en las redes sociales una crónica detallada del momento y se ganó la admiración de decenas de usuarios que celebraron su compromiso.

“Siete orcas estaban muriendo frente a mis ojos. ¿Cómo hago para describir el panorama? Es imposible transmitir con palabras el dolor y la desesperación que me produjo ver y escuchar a esos increíbles mamíferos llorando. Sí, llorando. Emitían sonidos agudos, quejidos lastimosos, que, sin lugar a dudas era llanto”, comenzó.

Y continuó: “Lo primero que noté es que nadie sabía qué hacer, no había ningún rescatista entrenado. Sólo teníamos algunos conocimientos básicos (…) Sabíamos que si no las ayudábamos con rapidez morirían en cuestión de horas”.

“Al cabo de unos pocos minutos, empezaron a llegar vecinos del pueblo, provistos de lingas anchas como mangueras de bomberos, y entre todos, empezamos a empujar a ese hermosísimo ejemplar que no dejaba de quejarse, para enderezarlo, ya que intuitivamente supimos que si la dejábamos de lado moriría”, prosiguió.

La ayuda tardaba en llegar. El grupo conformado por alrededor de 40 personas se organizó “a fuerza de gritos” y luchando contra la hipotermia. “Hacía frío. La temperatura del agua en esta época del año está, creo yo, en su punto más bajo”, describió Fabiana.

Y detalló: “Empezaron a llegar señoras mayores con vasitos plásticos, y bebidas calientes de todo tipo y color. ¡Podíamos elegir! Mamás que retiraron temprano a sus nenes del jardín, trajeron toallas. Y aparecieron también tres lonas blancas gigantes y más palas y más baldes y más brazos solidarios”.

Después de continuar con su crónica hasta llegar al momento exacto en el que logran rescatar a una de las orcas, la vecina resaltó la unión de los pobladores del lugar ante la adversidad: “Ahora somos hermanos. Y eso hace que Mar de Cobo sea cada día más, mi lugar en el mundo. Un lugar donde no hay grietas cuando de defender la vida se trata”.

Fuente: INFOCIELO

Deja un comentario