
Según su visión, el sistema actual impone una “alta carga impositiva sobre el trabajo” y agregó que existe una atención desproporcionada sobre las retenciones a las exportaciones agrícolas, pero escasa discusión sobre los impuestos laborales.
El funcionario también cuestionó la estructura de los convenios colectivos de trabajo y la aparición de lo que denominó “peajes”, es decir, costos compulsivos para trabajadores y empresas embebidos en las convenciones. Calificó estos cargos adicionales como “impuestos privados ilegales” y explicó que el decreto 149/25 busca prohibir tales aportes obligatorios desde la parte empleadora.
Por su parte, el Presidente de IDEA, Santiago Mignone, lanzó un fuerte llamado a los dirigentes políticos, con un pedido de “responsabilidad” para evitar que la economía «tiemble cada dos años producto de un proceso electoral y por la irresponsabilidad de sus actores». El directivo advirtió que estos vaivenes generan «una enorme transferencia de recursos, afectando, normalmente a los menos favorecidos y generando mayor pobreza».
Por otra parte, apuntó que “la Argentina necesita algo más que respuestas inmediatas. Requiere una mirada de largo plazo con políticas estables, instituciones sólidas, una macroeconomía ordenada y reformas que promuevan la competitividad. Hoy vemos que, con equilibrio fiscal, la inflación se va acomodando y la economía se va estabilizando”.
Mignone también criticó la falta de avance del Gobierno sobre algunos puntos que se habían pautado en el Pacto de Mayo junto a 19 gobernadores. “Hasta el momento, poco se conoce de lo hecho al respecto. Instamos a que, pasado el momento electoral, se retomen los puntos del pacto y se acuerden las medidas para su ejecución. Los pactos que sirven son sólo los pactos que se cumplen”.
El presidente de IDEA remarcó que “el Estado tiene un rol para jugar, que es dar previsibilidad económica y asegurar reglas claras y transparentes. Los gobiernos municipales, provinciales y nacional, en sus tres poderes, administran recursos de terceros, que son nuestros recursos, y por lo tanto se espera que lo hagan con responsabilidad. Terminando de una buena vez con los agravios y las discusiones que tienen al disenso como único objetivo”. (DIB)




