De acuerdo a la información obtenida, dentro de la UPPL, la Unidad de Policía de Prevención Local, hoy dependiente de la Bonaerense, se cuenta con un plantel compuesto por 198 efectivos, de los cuales, 50 están actualmente fuera de servicio, con licencia por carpetas psiquiátricas.
La evaluación histórica de este tipo de circunstancias y licencias por esta patología, debería ser muy inferior al actual. Además, se habría detectado que muchos de los policías de licencia en su seccional, realiza tareas de manera particular.
Por otro lado, a esto se suma la situación dentro de las Comisarías de la ciudad, en las que, en promedio, hay 8 efectivos por seccional, licenciados con carpeta médica.
A lo anterior, debe añadirse que la jurisdicción sufrió numerosos traslados de efectivos a otras localidades, pero la Jefatura de provincia no envió efectivos nuevos en su reemplazo, con lo cual, en total, Tandil actualmente sufre las consecuencias de contar con alrededor de 100 efectivos menos de los que debiera tener, lo que se traduce en la inseguridad en varias zonas de la ciudad, y las situaciones de robos contra la propiedad.
