El robo de dos transformadores de la red de EDEA ubicados en el Paraje San Francisco y Estación Chapadmalal dejó sin funcionamiento a cinco equipos de bombeo de Obras Sanitarias, lo que generó inconvenientes en la provisión de agua corrientes para los habitantes de esa zona de la ciudad.
Según se denunció desde la empresa, los delincuentes usaron un método habitual, que es el de dejar los transformadores al piso para luego llevarse el cobre que conforman los bobinados de los equipos, entre otros elementos del mismo metal.
Esta situación se suma a lo informado días atrás por la empresa distribuidora de energía EDEA, sobre el constante robo de equipos, lo que ha generado que amplias zonas de la ciudad se queden sin servicio eléctrico.
Los robos de cable se incrementaron fuertemente desde el mes de octubre a la fecha, centralizando los delincuentes su accionar sobre los tramos que van desde el pilar a la línea eléctrica los cuales son revendidos en el mercado negro.
La zona más afectada por el vandalismo es la comprendida por los barrios Punta Mogotes, Alfar, Colinas de Peralta Ramos y Juramento, donde se han registrado 40 de los 90 robos denunciados por EDEA ante las distintas jefaturas policiales.