Son parte del problema los dirigentes de Aldosivi, encabezados por los Moscuzza, padre e hijo. Los amantes de las estadísticas sostienen que el equipo del puerto, registra gran movimiento en los libros de pases a la hora de contratar jugadores de cartel, es decir caros en algunos casos.
Martín Palermo vio algo que no le gustó y se retiró con una renuncia a horas del debut en el próximo campeonato, lo cual genera incomodidad. El Titán se fue como si le hubieran faltado el respeto, no lo pusieron en valor: “Cuando agarré estábamos en el descenso y lo dejé 21º y a 17 puntos de Patronato” se atajó y manifestó “Siempre me costó tomar estas decisiones y duele hacerlo, pero a veces los caminos por recorrer son distintos”
Los máximos responsables de la dirigencia de Aldosivi quedaron bajo la lupa de toda la prensa deportiva más importante del país que sale en cadena y se consume en el mundo deportivo. Hazte la fama y échate a dormir, dice el refrán. El renunciante en off revolea la media, es obvio, si se sintió defraudado.
Si lo mismo, entre otros, ha ocurrido con Reinaldo Carlos Merlo y Fernando Gago, como con Palermo, el problema no son los técnicos sino la dirigencia. Lo mismo ocurre con la renovación de un plantel que no es barato, está en la mitad de la tabla en ese aspecto. Es difícil que no se consolide un proyecto deportivo, hay un enlace que no funciona.
Los técnicos y los jugadores que se van de la entidad luego hablan entre sí, y van conformando un cuadro de alteraciones en el que hacen ruido tantas contrataciones de técnicos, que llegan famosos pero que no tienen experiencia. “Nos usan” dicen desde el club, ¿o se dejan usar? Porque se reitera la misma mecánica sistemáticamente, lo cual llama la atención.
Además se ha probado con todos los target, no hay alternativa que se consolide. Aldosivi compite con presupuestos públicos de algunas gobernaciones, lo cual es un indicio que hay aportes significativos de recursos económicos.
¿Se administra mal o hay negocios que son incompatibles con el manejo de una institución deportiva? ¿Hay imprudencia en el manager y un representante con influencia en el vestuario que molestó a Palermo? ¿Hay procedimientos por los cuales el club Aldosivi es una sólo pantalla? El futbol es un negocio que mueve siderales cifras de dinero en el mundo.
Su enorme fanaticada es noble con los colores que son una identidad marplatense, una postal de la ciudad que ya se conoce en todo el país por sus colores emblemáticos, el auriverde es un clásico en el deporte más importante del país.
Por otra parte, las desatenciones del EMDER en torno al Estadio Mundialista José María Minella, le hizo cargar un pesado costo político al intendente Guillermo Montenegro, quien como defensa apuntó a los dirigentes de Aldosivi como responsables de su deterioro y por el magro canon que abordan.
Moscuzza afirmó que estaba dispuesto a llevarse a Aldosivi de Mar del Plata, porque no sentía que sus esfuerzos tuvieran reciprocidad en la intendencia. Felizmente desistió.
La realidad presupuestaria municipal, indica que Aldosivi ha evitado que el escenario luzca peor, con aporte directo de enseres necesarios para el mantenimiento.
Son espectáculos que se transmiten a todo el país, y evidencia como avanza el deterioro de los bienes públicos en Mar del Plata bajo la administración municipal, cómo la ciudad se vio privada de recibir Boca y Tigre en la final que fue a jugarse en Córdoba. Claramente el EMDER no recibe las partidas necesarias porque el objetivo no es una activa política deportiva.
Jorge Elías Gómez
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