El Gobierno anunció que apelará la medida cautelar que suspendió la exploración petrolera frente a las costas de Mar del Plata. La Secretaría de Energía insistió en su posición y señaló que la tecnología que se utilizará no representa un daño para el medio ambiente.
A través de un comunicado, el secretario de Energía, Darío Martínez, remarcó que el Gobierno “es respetuoso” de la Justicia, pero recalcó que la decisión tomada ayer por el Juzgado Federal N°2 de Mar del Plata que frenó la actividad de la empresa noruega Equinor “no es cosa juzgada”.
“Estamos convencidos que la exploración y la producción offshore es segura, no contamina, no perjudica la fauna marina, y por el contrario, genera recursos para el país y trabajo genuino y actividad económica para las localidades desde donde se opere el desarrollo de esta actividad”, señaló Martínez.
Asimismo, el funcionario nacional sumó que la apelación tendrá el respaldo de los ministerios de Ambiente y de Producción. En ese sentido, señaló que los equipos legales de esas carteras están analizando minuciosamente el fallo y preparan “la presentación judicial correspondiente”.
Como publicó LA NACION, el juez El juez federal Santiago Martín ordenó que la empresa Equinor Argentina se abstenga “de iniciar las tareas de exploración” hasta tanto “se dicte sentencia definitiva” en la causa, que reúne una serie de presentaciones realizadas por distintas organizaciones ambientalistas, un particular y el intendente local, Guillermo Montenegro.
El magistrado fundamentó su decisión en al menos tres elementos planteados por los distintos amparistas: el cumplimiento defectuoso de los estándares en materia de información y participación establecidos por la legislación vigente -en particular, el Acuerdo de Escazú (Ley 27.566)-, la falta de una instancia de consulta al Municipio de General Pueyrredón en el proceso de toma de decisión y, por último, falencias del Estudio de Impacto Ambiental derivadas de la insuficiente proyección sobre los impactos acumulativos de las exploraciones a realizarse en el Mar Argentino.
El juez destacó que “la exposición al sonido irradiado por una campaña sísmica puede resultar significativa” para los invertebrados marinos, los peces, los mamíferos marinos, las tortugas marinas y aves marinas”. “Para los peces e invertebrados los daños pueden ser físicos y/o fisiológicos, pueden conducir a un deterioro en la audición que reduzca su aptitud de supervivencia, cambios de comportamiento”, afirma.
El juez determinó entonces que “frente a la eventualidad de un perjuicio irreparable derivado de la ejecución de las tareas de exploración” corresponde suspender las actividades hasta el dictado de un fallo de fondo.
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