El 9 de diciembre, 24 horas antes de quedarse sin la mayoría propia que ostentó estos dos años, el peronismo del Senado aprobará los 116 decretos de necesidad y urgencia dictaminados la semana pasada, en lo que será la última sesión con la actual composición de la Cámara.
La decisión se tomó este miércoles por acuerdo de los jefes de bloque José Mayans (Frente de Todos) y Luis Naidenoff (UCR) y tiene que ver con que ese mismo día se llevará a cabo la jura de los 24 senadores electos el 14 de noviembre, una ceremonia que por reglamento debía realizarse el 29 de noviembre pero no fue posible porque no llegaban los certificados de escrutinio.
Es que con el retraso de la fechas de votación se acotó el tiempo de las justicias electorales para contar los votos y oficializar los elegidos, por lo que hubo consenso entre oficialismo y oposición para cambiar la fecha de jura por única vez.
Claro que en tiempos de sesiones presenciales, no es fácil traer a los senadores y si ya tienen que comprometerse para le 9, no había otra alternativa que sesionar ese día. No podía demorarse un día más porque el 10 vencen los electos en 2015 que no renovaron su banca y el Frente de Todos se quedará sin mayoría propia para organizar el temario a gusto.
El cronograma se dio a conocer en la reunión del bloque Frente de Todos de este miércoles liderada por Mayans, en la que no hubo chispazos como en el encuentro posterior a las primarias, en el que fue necesaria una pequeña arenga de Cristina Kirchner.
Tampoco hay señales de ruptura, pese a los amagues de los gobernadores Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Sergio Uñac (San Juan). Logró contenerlos Juan Manzur antes de las elecciones y la albertización del gobierno posterior a la elección los detuvo. Al menos por ahora
Pero no descartan chispazos internos si el kirchnerismo, representado en Oscar Parrilli y la vicejefa Anabel Fernández Sagasti, se resiste a aprobar leyes enviadas por el presidente, como el plan plurianual para cumplir con los requisitos del FMI. No hay discusión sobre las autoridades: Mayans seguirá como jefe y Fernández Sagasti como vice. Ese no era el problema.
La sesión del 9 tendrá varios proyectos pendientes acordados por ambas bancadas, pero los 116 decretos tal vez sean los últimos expedientes en mucho tiempo que Cristina digite con mano de hierro haciendo uso de una mayoría automática.
En realidad, en este caso el beneficiado es Alberto, porque si los decretos no tenían al menos la aprobación de una Cámara una mayoría opositora improvisada podía desestimarlos. En el Senado el oficialismo confía en tener al menos de aliados eventuales al rionegrino Alberto Weretilneck y la rionegrina Magdalena Solari Quintana. Pero no pueden garantizar que no se les escapen alguna vez.
Los decretos son de los temas más variados: algunos con medidas de comienzo de gestión, otros sobre los aislamientos de la pandemia y los últimos más recientes sobre temas variados como laborales, migratorios o arancelarios.
Juntos rechazó el tratamiento de los decretos, no asistió a la bicameral de trámite parlamentario en la que se emitió dictamen y anunció el rechazo cuando lleguen al recinto. Serán minoría.
