Un alto funcionario de Seguridad no podría conciliar el sueño por seguir a pie juntillas la premisa que lo primero es la familia. Las pesadillas de las Licencias Truchas se perfilan como más terroríficas que las de Freddy desvelando el sueño del “buen hijo”.
La postal grotesca de un tradicional paseo costero marplatense preanuncia un maremoto, que ya ha puesto a algunos personajes de peso, en el ámbito del turismo local, al borde de un ataque de nervios. Playa Chica, Escandalo Grande… ¿Hay teléfonos pinchados? Más escuchas que en la ex SIDE.
Todo para mi madre y una licencia trucha para mi padre. El tema de las licencias apócrifas volvió a la agenda del HCD y a los corrillos del Palacio Municipal, que mencionan entre quienes habrían accedido de manera irregular a ellas, al padre de un alto funcionario de seguridad, al hijo de una reconocida actriz, que no gana para sustos y que vive de fiesta en fiesta, novel actor él y enamorado de una leona. Además de mencionarse a un par de funcionarios, el uno emparentado con un ex futbolista, que se destacó en la década del 60’ como temerario “artillero”, y el restante vinculado al deporte de las narices chatas.
Una postal grotesca. La Unidad Turística Fiscal de Playa Chica, clausurada por falta de exhibición del certificado de habilitación que la municipalidad debía y se niega a otorgar, y más allá del natural y gradual deterioro por la inactividad impuesta, así como del daño patrimonial en detrimento de los intereses del concesionario, que habría intimado al EMTUR a definir su situación contractual, se muestra, esta temporada estival, como una postal grotesca para la imagen turística de la ciudad.
Lo grotesco y lo sórdido cohabitarían también en un frente judicial abierto, con denuncias penales en curso de investigación contra altos funcionarios públicos por posibles delitos, denunciados por el concesionario, y podría extenderse como una mancha de aceite.
Piedra libre para las “manos negras”. Las paredes de los pasillos del Palacio Municipal, devuelven el eco de la denuncia penal, que efectuara el concesionario de la UTF Playa Chica ante la Justicia Federal, en relación al uso de piedras potencialmente contaminadas en la obra hidráulica de ampliación de la escollera del Club Náutico Mar del Plata, que podría terminar al grito de “Piedra Libre para las manos negras”, que estarían abocadas, afanosamente, al “mètier á tisser” de tramas ocultas e intrigas palaciegas…
Al borde del panic attack. Los corrillos del Palacio Municipal, también, comentan que habría generado cierto nerviosismo en algunos altos funcionarios del EMTUR, el requerimiento de entrega de los expedientes, que se tramitan en esa área y en el Tribunal de Faltas Nº 5, por parte de la Fiscalía, donde se investiga la denuncia del concesionario de la UTF Playa Chica.
El rumor circulante acerca de que habría escuchas y grabaciones telefónicas de relevancia para la causa, habría puesto a ciertos pesos pesados del turismo lugareño al borde del panic attack, quienes, a su vez, extraoficialmente habrían tomado conocimiento de que habría una importante cantidad de medidas de pruebas, en ciernes, de ordenar en la causa.
Teléfono intervenido. Circula el rumor que el concesionario Gerardo Fernández habría adquirido cinco o seis celulares, ya que alguna “mano negra”, que no sería la del ex agente de inteligencia Stiuso, habría intervenido su teléfono móvil.
Este caso es parangonado, en los corrillos palaciegos, con “el intento de desplazar al tenedor precario de la UTF Waikiki”, que no habría rematado en escándalo por la oportuna intervención del HCD.
El frente judicial abierto por el titular de la UTF Playa Chica promete seguir produciendo novedades y rematar, irremisiblemente, si no en un maremoto, por lo menos, en un Escándalo Grande…
