Volvió a ganar luego de varios traspiés y encima lo hizo en condición de visitante. Quilmes logró su primera alegría en estadios ajenos y elevó su récord a dos triunfos y catorce caídas. Por su parte, Lanús encadenó su cuarta derrota consecutiva y ostenta una cosecha de cuatro victorias y doce reveses, en el marco de una nueva fecha de la Liga Nacional de Básquetbol.
En el plano individual se destacó la enorme producción, una vez más, del foráneo Walter Baxley con 26 puntos (9/20 en tiros de campo y 8/8 en libres) y 6 rebotes, secundado por Luis Cequeira, que regresó a la actividad tras su lesión, con 13 unidades (3/3 en triples). En el rincón local se destacó John Millsap con 20 tantos y 7 rebotes, así como volvió de su fractura en el dedo índice derecho el alero Patricio Rodríguez.
El encuentro comenzó signado por las imprecisiones y dificultades para construir las ofensivas en ambos equipos, por eso el tablero marcó la igualdad en 7, a los 6 minutos. El anfitrión optimizó su andar con apariciones de Fernández Chávez (6) y la movilidad del balón para cerrar arriba 17-14, en un contexto de magros porcentajes para la visita (35% en lanzamientos de campo).
El segundo capítulo mostró la misma paridad, ahora con el “Cervecero” usufructuando de todo el bagaje de Baxley (10), mientras que el “Granate” contó con el desequilibrio de Millsap (7). Inmersos en la necesidad de ambos de ganar lucieron las inconsistencias, como el 0/5 en triples del local y las 4 pérdidas de los marplatenses. La chicharra sonó con Lanús adelante por la mínima 37-36.
Tras las charlas en vestuarios, se produjo el mejor momento del elenco de Intonio en la noche, bajo la buena conducción de Cantero y los aportes de Millsap (5) y Williams (4) para acaparar la máxima 52-42, a falta de 4 minutos. Empero, Quilmes reaccionó rápidamente con la experiencia de Cequeira (9), que se cargó al hombro los ataques, además del goleo de Baxley (8) y clavó un pasaje intenso de 16-4, que le permitió clausurar el cuarto en ganancia 58-56.
En el último segmento surgieron las asperezas e inseguridades, para generar un trámite trabado. Quilmes aprovechó ese entorno y tomó una brecha 68-63, con un inspirado Maciel (8), a falta de 4 minutos, lo que obligó al tiempo muerto de Intonio. Lanús remontó con un parcial 7-1, con Millsap (8) como faro, y revirtió el tanteador 70-69, con 2:30 minutos en el reloj. En ese punto brotaron las equivocaciones, pero Maciel sacó a relucir su experiencia con un doble largo y un par de simples, para decretar la ansiada victoria para un Quilmes, que después de mucho tiempo volvió al triunfo.
