Planteó descarnadamente en la Comisión de Promoción y Desarrollo del HCD, el secretario de la Cámara de Ferreterías y Afines de Mar del Plata, Roberto Di Nucci, en el marco de un encuentro donde el vicepresidente de la UCIP Néstor Martín reclamó “la suspensión de los permisos de construcción relativos a las grandes superficies hasta que podamos humildemente poder participar y definir políticas de estado en relación a este tema”, sostuvo.
Acto seguido, Martín manifestó: “estamos sorprendidos que se estén planteando las inversiones de las grandes superficies como si fueran inversiones de gestión pública cuando son inversiones que en lo social, en lo comercial, y en lo económico van a perjudicar a la ciudad”.
Ejemplificó para graficar la problemática y su impacto socio-económico “el caso de la apertura de una sucursal de Blastein en la ciudad, sin habilitación, por lo cual facturaba con domicilio en Capital Federal evadiendo el impuesto de Seguridad e Higiene e Ingresos Brutos”.
Por su parte, Di Nucci agregó: “quisiera hincar más a fondo el chuchillo porque sabemos que Mar del Plata tiene poco empleo y viene en caída”. Y puntualizo que “la cadena Easy ya estuvo citando empleados nuestros para cubrir su staff porque no cualquiera puede ser empelado de ferretería, hay que saber de pintura, de electricidad, de sanitarios, de herramientas, de reparaciones y un montón de cosas que no se aprenden de un día para el otro. Y de hecho estamos propulsando desde la Cámara de Ferreteros una escuela para formar empelados de ferretería”.
El empresario aseveró que “en consecuencia esos puestos de trabajo que supuestamente ofrece Easy consiste en sacarnos empleados a nosotros para armarse ellos de personal. Entonces no están generando nuevos empleos y ya tuvimos la experiencia con la construcción cuando se instaló Carrefour, hasta los camiones venían de Buenos Aires cargados de materiales y en menos de 60 días tenían armado absolutamente todo”.
Di Nucci remarcó que “es absolutamente transitorio el empleo que generan las grandes superficies. Y el otro tema es la práctica comercial de dumping que lleva a la quiebra de las pequeñas y medianas empresas locales”, sentenciando que “el círculo virtuoso del capital se ve alterado fuertemente por el asentamiento de grandes superficies comerciales que operan como grandes aspiradoras del capital en contra de nuestros intereses”.
Asimismo, refirió que “estudios internacionales indican que para producir una misma unidad económica por cada puesto de trabajo que utiliza un híper, el comercio PyME da empleo a 7 personas. En otras palabras, por cada persona que emplea un híper, se generan 7 nuevos desocupados”.
Graficó también que “si un hipermercado anuncia que empleará a 800 personas los nuevos desocupados serían 5600 restando los supuestos 800 trabajadores, el saldo de desocupación igual sería altísimo 4800 personas. Quienes tienen familias detrás y en muchos casos, son el único sostén de la misma. Por lo que el número total de personas afectadas es todavía mucho mayor”.
Y concluyó sentenciando que “los puestos de trabajo que dicen generar no son más que excedentes de otras bocas propias por lo que los nuevos puestos de trabajo no son tales, sino traslados de personal. Estas grandes superficies generan un impacto ambiental y socioeconómico poderoso y lejos de impulsar la economía local la destruyen”.
Roberto Latino Rodríguez
