Jorge Elias Gomez, Opinión

Pinamar: ganó la unidad de negocios

blankAyer cuando a las 17.00 las agencias nacionales de noticias informaban que Daniel Scioli se dirigía hacia Pinamar, indirectamente se estaba dando a conocer quién era el ganador en esta elección (sólo para intendente). Scioli no iba a mover sino ganaba Altieri, elemental en política. Poco después de las 18.00 ya estaba reunido con su delfín en la playa verde Argentina.

Detrás hay toda una historia, de protagonistas que formaron parte de un acto electoral, cargado de particularidades, que adquieren una dimensión especial por las características del escenario de la contienda.

Entre un grupo de seguidores de Mercedes Taurizano, una concejala radical dentro del Acuerdo Cívico y Social, juntaron $ 50.- para alquilar un bombo para el acto de cierre. Fue el último miércoles, en el Día de la Memoria, bajo el sol radiante de Pinamar. Apostaron fuerte Ricardo Alfonsín y Margarita Stolbizer.

Blas Altieri invirtió algunos miles de dólares más en la campaña. Todas las pantallas estratégicas en vía pública de esa hermosa ciudad, tenían la imagen de quien fuera intendente desde 1991 hasta el 2007, dieciséis años ininterrumpidos, donde supo tutearse con los ex presidentes Menem y Duhalde.

Cuando apareció Porretti a escupirle el asado, de la mano del Frente Para la Victoria, proceso judicial mediante, el soldado kirchnerista fue destituido, siendo objeto a partir de entonces de diversos mecanismos para sacarlo de la cancha. Se presentó a elecciones y volvió a ganar, pero lo desalojaron de su banca.

Porreti contó con el auxilio del vice gobernador Alberto Balestrini. Mientras Scioli le levantaba la mano a Blas Altieri, Porretti debió ir con su “muletto” a la elección de ayer Roxana Di Pasquale, quien vistió los colores del Frente Para la Victoria. Las máximas autoridades institucionales de la Provincia, tuvieron distinto pollo en esta interna que sirvió además, para saber quien detenta el poder del Movimiento Nacional Justicialista, otra cuestión de fondo que se resolvió en la víspera.

La candidata Di Pasquale, contó con el invalorable apoyo del aparato del vice gobernador bonaerense, inmensos globos inflables de color rabioso, flameaban tentando a los electores pinamarenses. Finalmente entró tercera con una magra cosecha de votos. Una lápida para la carrera sin retorno de Porretti.

Mercedes “Chuqui” Taurizano, quedó a 8 puntos porcentuales de Altieri (46-38). Las expectativas de la candidata de la UCR, en la polarización previa, se diluyeron con la proyección de indecisos quienes finalmente se inclinaron por el cuatro veces intendente. Esta historia puede volver a repetirse dentro de un año. Altieri fue elegido ayer para cumplir el mandato del destituido Porretti, es decir hasta el 10 de diciembre de 2011. Este quinto mandato del magnate de Pinamar, es por 18 meses.

Según fuentes confiables, consultadas en Pinamar, muchos seguidores despechados de Porretti prefirieron ir en apoyo de Taurizano, con el ánimo de borrar lo que entienden una tendida de cama al ex intendente destituido por su propio bloque, en una operación política que se atribuye al poder político y económico de Pinamar. Este balneario, tiene como una verdadera perla preciosa a Cariló, también a Ostende y Valeria del Mar. Es la cocina del verano; de los más trascendentes acuerdos y alianzas políticas.

Esta es la lectura doméstica del resultado. Pero los análisis se transportarán con seguridad a 300 kilómetros, al corazón del poder del país, la Capital Federal. Habrá conclusiones para todos los gustos, replanteos y los respectivos pases de factura con acuse de recibo. ¿Qué representan 15.000 votos (total de Pinamar)? Es insignificante ese número en el universo del mapa electoral de una provincia que reúne el 40 % del padrón general del país.

En la Casa Rosada no se desentendieron de lo que iba a ocurrir, en esta villa balnearia de ensueño. Una encuesta ordenada desde el Ministerio del Interior, reveló a mediados de marzo, que Altieri ganaba por alrededor de 10 puntos, con el tradicional porcentaje de indecisos, siempre con Taurizano como segunda. Los resultados no fueron dados a conocer oficialmente, con el propósito de no crispar más a quienes jugaban en el Frente Para la Victoria, finalmente sabían que Altieri terminaría jugando con ellos. Scioli fue el primero en transmitírselo, para “Articular los esfuerzos de Nación, Provincia y Municipios”, como alguna vez suele escuchárselo, en su discurso monocorde.

Taurizano, una docente bonaerense, que se especializó como maestra jardinera, retornó a la política tras años de militancia, después del 2001, precisamente cuando la ciudadanía proclamó el nunca cumplido “Que se vayan todos”. Con los principios de la honradez y la transparencia, enfrentó cuerpo a cuerpo al mayor poder político y económico,  personalizados en estos casos por Scioli, Balestrini y Altieri. No tuvo la recompensa que esperaba, pero tampoco defraudó en un marco de racionalidad y tolerancia, se sometió a la prueba de la democracia, cuya restauración celebró fervorosamente en 1983, con la llegada de Raúl Alfonsín.

Con la bandera de la austeridad, vivió  la opulencia de sus adversarios en la campaña, convencida que su mensaje finalmente iba a penetrar en la voluntad de sus conciudadanos, que la hicieron concejal el 28-J. La pantalla del canal local del servicio de cable de televisión, se cerraba con un particular aviso, todas las noches (del último mes) los habitantes de Pinamar se iban a dormir con la propaganda de Altieri. Una pelea muy despareja.

Hoy los títulos de todos los diarios (fundamentalmente de tirada nacional) informarán que ganó Altieri, el candidato del gobernador Daniel Scioli, ambos llegaron a la política de la mano de Carlos Menem. Tal vez ahora el ex motonauta pueda exhibir otro galón para la desconfianza del matrimonio Kirchner, que no dejan de someterlo a un “scouting”, como plan B, en función de lo que vayan vomitando las encuestas, para el turno presidencial del 2011.

La reabsorción es un privilegio, del que excluyentemente gozan los candidatos del P.J., así ha quedado demostrado una vez más. Hay menemistas y duhaldistas que han abrazado la fe pingüina. Altieri y Scioli son compañeros de ruta del mismo itinerario.

Jorge Elías Gómez
jgomez@mdphoy.com

Un comentario

  1. Típico comentario que encontraría si abro Clarín. Además, hace unos minutos, entré a un blog donde decía: “Clarín” y tenía exactamente este mismo formato. ¿Coincidencia?. Por favor, basta de hipocresía.

Deja un comentario