Mariana Varela de 46 años y Laura Garberi de 29, se encadenaron en señal de protesta en la puerta del PAMI, ubicado en Balcarce y Salta. La medida de fuerza la llevan a cabo debido a que el martes pasado las dos trabajadoras fueron despedidas “sin justificativo alguno”, argumentaron las damnificadas.
Ambas mujeres son discapacitadas motrices y no entienden como una entidad que depende del estado nacional, el mismo que a cada instante refleja a través de cada Cadena Nacional, de publicidad gubernamental en los programas Fútbol Para Todos y Automovilismo Para Todos los resultados de la inclusión social, las haya despedido, asegurándonos “no dábamos con el perfil y no nos explicaron más nada”, afirmó Mariana.
Asimismo la mujer ratificó que en enero “fuimos convocadas por la Ley de Discapacidad para cubrir el cupo. Después de varias entrevistas y test que nos realizaron, ingresamos a PAMI aclarándonos que había una período de prueba que no era excluyente, entonces me quedé tranquila porque tengo un hijo que mantener”.
Acto seguido Varela agregó que “ingresé a mi trabajo, trabajé los tres meses y de un día para el otro me dijeron que me tenía que retirar y esperar el telegrama porque no doy con el perfil”.
Por su parte ambas mujeres se comunicaron después de insistir en varias oportunidades con el titular de la entidad Fernando Alí, para que le brinde las explicaciones del caso. La máxima autoridad del PAMI local, se comprometió en tratar su tema pero les aseguró que la decisión final no pasaba por su persona sino que debía consultar en Buenos Aires.
No obstante en el transcurso de este viernes, se realizará una audiencia en el Ministerio de Trabajo, en conjunto con responsables de la entidad para tratar de llegar a un acuerdo.
Sin embargo Mariana, firme en sus convicciones, además presentó una denuncia en Derechos Humanos, con la única finalidad que el caso agote todas las instancias y de esa manera volver a recuperar su fuente laboral.
Foto: Beto Mena