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Ocupantes del avión iraní son investigados por posibles vínculos al terrorismo

 

El lunes 6 de Junio aterrizó en Ezeiza un avión iraní, proveniente de Caracas y con identificación venezolana. Si bien al comienzo no llamó la atención, resultó interesante el hecho de que las autoridades uruguayas habían rechazado su pedido de aterrizaje para cargar combustible, además de que esa misma aeronave fue sancionada por Estados Unidos en el año 2020.

Las autoridades argentinas detuvieron a los 19 pasajeros, de los cuales 11 eran venezolanos y 5 de ellos de Irán. Enseguida comenzó una investigación judicial a cargo de la fiscal Cecilia Incardona y del juez Federico Villena. En las últimas horas, la mujer solicitó que se investigue la procedencia de los cinco árabes para saber si están ligados al terrorismo.

Al ser una temática sensible para la ciudadanía en general, Incardona pidió además, el secreto del sumario para evitar que se filtren datos en la prensa y medios de comunicación. Los cinco sospechosos tienen sus pasaportes retenidos por 72 horas y se les tomaron las huellas digitales desde el hotel en el que están albergados, el Plaza Canning Dessing.

Todas las medidas en el caso del avión fueron tomadas con suma urgencia por el juez Villena, ya que fue presionado por la DAIA (Delegacio?n de Asociaciones Israelitas Argentinas), quienes además son el querellante de la causa. Ellos no sólo tendrán acceso al expediente, sino que también podrán solicitar pruebas, información y tomar las medidas judiciales que deseen.

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