Los gobernadores le plantearon a Alberto Fernández que no suspenda las clases presenciales en todo el país en la nueva cuarentena que anunciará antes del fin de semana.
En la reunión virtual que el presidente tuvo con la mitad de los mandatarios provinciales este martes, el gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, fue quien llevó el planteo para mantener las clases en las aulas.
Zamora dijo que en su provincia, como en buena parte del interior, seguía habiendo clases y eso no había acelerado los contagios. Le pidió en ese sentido que no hiciera extensivas al resto del país las medidas que toma para el Área Metropolitana de Buenos Aires, que lo enfrascaron al presidente en una pelea feroz con Horacio Rodríguez Larreta.
Alberto respondió que a él no le preocupan las aulas abiertas sino la circulación que se genera para llevar a los chicos a las escuelas. Zamora le respondió que eso en Santiago no era un problema, debido a la diferencia abismal de flujo en el transporte público si se la compara con la Ciudad y el Conurbano.
El jujeño Gerardo Morales se sumó al pedido de Zamora y a su turno explicó que desde el inicio del ciclo lectivo en Jujuy ya estaban teniendo clases con la presencialidad administrada de la que hoy habla el ministro Nicolás Trotta.
Giro de Alberto: baja la tensión con Larreta y los gobernadores
Ya desde el 17 de febrero -la misma fecha en la que comenzaron las clases en la Ciudad- los cursos con más de 15 alumnos tienen clases día de por medio en Jujuy. Morales explicó que en su provincia el contagio en clases representa solo el 0,128% del total de los casos.
Alberto aceptó revisar el planteo antes de redactar el nuevo DNU que reemplazará al que vence este viernes. Entre los gobernadores había buen clima por la convocatoria, que como explicó LPO significó un giro de Alberto respecto de las anteriores definiciones que tomó contra la pandemia. El presidente había roto el religioso itinerario del año pasado, cuando reunía a todos los gobernadores antes de anunciar las medidas restrictivas.
Los gobernadores también propusieron que se vuelva a utilizar el criterio de los números pares e impares del DNI para alternar la circulación. Alberto les confirmó que ya lo estaban analizando.
.