¿Cómo resuena la política marplatense en el Sindicato de Trabajadores Municipales?
Aunque este detalle parezca curioso, es un dato no menor en la movida que se está gestando en la ciudad y que viene a la sazón a raíz de un conflicto salarial en el que la conducción sindical debió pedir un salvavidas para no ahogarse.
En los pasillos de Moreno y Pampa (sede del STM) se camina cada vez más cerca de la cornisa, las históricas internas no son novedad, pero en los últimos meses, luego de la “interna” de la OAM los posicionamientos están muy activos.
Parece que el oficialista Daniel Zacarías es excluyente, fue triunfador en la interna de la mutual OAM y mantiene un estrecho vínculo con la UCR-PRO local, y quiere al sindicato municipal oficialmente en su espacio
.Todos, ya comentan que su posición cambió totalmente luego de esa elección interna, y ya actúa como el Secretario General (aunque su cargo es adjunto).
Su aspiración es cada vez más clara, lo que deja a un Antonio Gilardi, actual secretario General, en una situación incómoda y debilitada luego de casi 30 años sin obstáculos en el poder.
Muchos, ya mencionan un desgaste luego de tanto tiempo, y el fin de su ciclo con decisiones basculantes muy notorias en su conducta. Como por ejemplo convocar a una movilización al palacio municipal para presionar al ejecutivo, cuando todos saben que Montenegro tiene su oficina en el COM.
También da señales de preparar el terreno en la partida, y queda reflejado en las reformas que se realizaron en la sede gremial y el camping, que expone diversas y obvias razones a favor para jubilarse en la próxima etapa.
Los Municipales caen en un abismo sin precedentes e imprevisión, para la conducción que sucederá. Sobre todo por la falta de unidad y líderes con consenso, sumado a las renuncias a la conducción hace meses de la Agrupación MAREA, sector más joven del Sindicato que dejó la Comisión Directiva con fuertes denuncias contra Gilardi y sus punteros en el gremio.
Estiman que con Zacarías con las riendas del STM, los radicales se quedan con otro bastión de poder en la ciudad. Si continúa Gilardi, sería insostenible la unidad. Se especula que existen movimientos de nuevas agrupaciones que piensan disputar espacio en el STM para el 2023 con grandes posibilidades.
No hay un camino cierto, todo incertidumbre, mucha rosca y pocas alternativas. Por ejemplo qué papel se jugará dentro del FESIMUBO, y cómo se alineara una eventual nueva conducción.
Lo que sí está muy claro es la falta de legitimidad y adhesión de Gilardi y Zacarias en las bases, el descontento es generalizado y da indicios de un fin de ciclo para el oficialismo gremial municipal.
Así quedó demostrado en la última negociación salarial que culminó el lunes y dejó al intendente Montenegro con la aprobación de una propuesta casi indecente, frente a la proporción del reclamo, fue como una payasada con demasiado circo, como ya lo había adelantado a mdphoy.com , un ex funcionario de fuste de la MGP.
El intendente no los atiende y su vocero no estuvo a la altura y fue desconocido, “no nos pagan y encima no nos atienden”, dijo Gilardi, casi puchereando.
.gif)
[1].gif)