La embarcación llegó escoltada por decenas de embarcaciones y amarró en el puerto de Mar del Plata, donde turistas y militantes brindaron una colorida bienvenida. Hubo acrobacias aéreas y fuegos artificiales
El buque, que estuvo retenido en Ghana por un embargo de fondos buitre, dejó en horas de la tarde el lugar donde esperaba para hacer su entrada en aguas argentinas yalrededor de las 17:30 amarró en la terminal portuaria de la ciudad balnearia.
Desde temprano, el kirchnerismo había movilizado una gran cantidad de militantes hasta esta localidad, que junto a veraneantes y familiares de los marineros se apostaron en las inmediaciones de la terminal para presenciar el evento.
El retorno del buque escuela de la Armada se transformó en el principal punto de atracción de la turística Mar del Plata, al punto que generó merchandising propio, con vendedores que ofrecían banderas y todo tipo de recuerdos, en muchos casos con sellos partidarios.
El tenor político que adoptó el hecho se hizo patente cuando, en horas de la tarde,simpatizantes del Gobierno chocaron con caceroleros que protestaban en la zona de Playa Grande, lo que obligó a la Policía a intervenir. Luego de algunos forcejeos y de cánticos cruzados, la situación se calmó.
Más allá de ese episodio, la bienvenida a la Fragata Libertad contó con una muestra de paracaidistas y buzos tácticos cuando la nave ya se encontraba a metros de la costa marplatense. También hubo un show de arobacias aéreas.
El kirchnerismo dominó la escena
La liturgia K se adueñó del evento desde el comienzo. Antes de que la mandataria se hiciera presente en el lugar, sonó “Avanti Morocha”, la canción de Los Caballeros de la Quema con la que la militancia afín al Gobierno suele vitorear a Cristina Kirchner.
La gobernante arribó a Mar del Plata procedente de la quinta de Olivos a las 19:30. Minutos antes de las 20 ya había subido al buque escuela, donde saludó uno por uno a los integrantes de la tripulación. Luego de entonar las estrofas del himno –cuyo intérprete fue Darío Volonté– , ofreció un discurso cargado de críticas contra los llamados “fondos buitre”, en el que sostuvo que el Gobierno mantendría las mismas políticas en defensa de la soberanía.
La alocución se vio interrumpida en ocasiones por las consignas que gritaba la multitud. “Patria sí, colonia no” fue una de ellas, que luego fue retomada en las palabras de la propia mandataria.
También hubo cánticos alusivos al nombre de la nave, que en la víspera algunos rumores indicaron que se podría cambiar: “Borom bom bom, borom bom bom, es la fragata Eva Perón”.
La Presidente fue la única oradora de la jornada, pero en el lugar se pudo ver a varios miembros del Gabinete, además del vicepresidente, Amado Boudou: Florencio Randazzo, Alicia Kirchner, Guillermo Moreno, Héctor Timerman, Hernán Lorenzino, Martín Sabbatella, entre otros. También estuvo la flamante embajadora argentina en los Estados Unidos, Cecilia Nahón.
Entre los gobernadores presentes se contó a Juan Manuel Urtubey, Sergio Urribarri, Maurice Closs, José Luis Gioja y Jorge Alperovich.
Otras figuras del kirchnerismo que se acercaron a recibir a la Fragata Libertad fueron Luis D’Elía, Emilio Pérsico, Carlos Kunkel, Diana Conti, Jorge Landau y Estela de Carlotto.
Los festejos
Finalizado el discurso de Cristina Kirchner, que cerró con fuegos artificiales, se dio paso a la ceremonia organizada por Javier Grossman. Se trata del mismo hombre que estuvo detrás de los festejos del Bicentenario y del Día de los Derechos Humanos, celebrado el pasado 19 de diciembre en la Plaza de Mayo.
El acto debía incluir un espectáculo artístico del Choque Urbano y un festival de luces y fuegos artificiales, entre otras atracciones.
Infobae
