El fiscal Germán Moldes, uno de los abanderados en la lucha por la reapertura de la investigación del fallecido fiscal Alberto Nisman sobre el supuesto encubrimiento del Estado argentino a Irán en la causa de la AMIA, lanzó un mensaje de alerta por la amenaza del líder de Quebracho, Fernando Esteche, quien había advertido que si un juez metía presa a la ex presidenta Cristina Kirchner podría aparecer muerto.
“No se tomen en broma lo que dijo Esteche. Cuando Esteche dice ‘si un juez llegara a detener a Cristina, podría aparecer muerto’, no es un chiste. Porque Luis D’Elía sí es un bromista; Esteche, no”, afirmó el abogado en el programa radial de FM Milenium “Mañana Empiezo”, con María Laura Santillán.
Y agregó: “por denunciar a Cristina, hay uno que ya murió. Y no lo estoy diciendo yo, lo está diciendo la Corte. La Corte Suprema dijo: ‘La muerte de Nisman, cualquiera haya sido el mecanismo de su producción, es una consecuencia directa de su trabajo como Juez federal'”.
La corrupción durante el kirchnerismo
“El volumen no tiene comparación con lo que habíamos visto hasta acá y sobre todo el nivel de la organización montada para delinquir. Una organización que no tiene otro objetivo que el de delinquir. No se trata de sólo un vuelto, hubo algunos casos de empresas enteras, cantidades ingentes de fondos públicos que han desaparecido”.
¿Cristina presa?
“De momento no veo razones para que esto ocurra. Ella ha tenido una actitud muy soberbia, con el discurso de que el partido judicial, las persecuciones… pero hay que reconocer que cada vez que es citada, ella concurre obedientemente, por supuesto con un discurso que ‘es el cumpleaños de mi nieta, vengo a dar un discurso’, pero en realidad viene porque la citan los jueces. Entonces, mientras mantenga esta conducta no veo motivos para que se vea afectada su libertad”.
La investigación de Nisman
“La de Nisman no avanza tan rápidamente porque el equipo de abogados se está manejando a veces dentro de lo que serían las trampas permitidas por un procedimiento obsoleto y otras veces con artimañas y jugarretas de centro de estudiantes de secundario, como me hicieron el año pasado a mi, demorando la tramitación del recurso para que entrara de turno Javier De Luca, a quien ya le habían encargado que, desistiendo mi recurso, terminara con esa denuncia”.
En busca de la verdad
“Yo no creo que esto se trate de una diferencia entre kirchneristas y anti-kirchneristas. Se trata de que algunos queremos hacer nuestro trabajo y otros no nos lo permiten. Es como si algunos de los denunciados por Nisman no consintieran ponerse bajo el escrutinio de los jueces y eso el sistema democrático no lo puede tolerar”.
“Esto es una estrategia defensiva que les viene dando muy buenos resultados. Consiste en ensuciar, empantanar, embarrar, distraer, recurrir, objetar, apelar, obstruir de tal manera que todo vaya para adelante, a ver si la indignación social se calma”.
La esperanza de la reapertura
“En esta misma semana, se produjo otro hecho trascendente. El juez Sergio Torres llamó a indagatoria a Angelina Abbona, por la denuncia que yo radiqué contra Angelina Avona. La denuncia que yo hice tenía que ver con los primeros momentos de la denuncia de Nisman. En la Procuración del tesoro se elaboró un dossier que se elevó al juez Rafecas y basándose buena parte de sus argumentos en ese dossier, Rafecas se negó a abrir esa denuncia. La Procuración del Tesoro no estaba habilitada para intervenir en estas causas penales y ya había pronunciado decenas de veces que en este tipo de denuncias judiciales no tenía posibilidad de actuación. Allí mismo, se le dio lugar a que presentara esto y se usaron a los abogados del Estado para la defensa de personas particulares: Cristina Fernández, el canciller Timerman… Eso se llama peculado de servicios y es una variante de la malversación. Se esta malversando a esos abogados que estamos pagando nosotros para que defiendan a personas particulares”.
“Más tarde o más temprano, la denuncia de Nisman se va a investigar. Lamento no estar en condiciones de decir lo mismo con relación a lo que tiene que ver con la muerte de Nisman”.
Limpieza del Poder Judicial
“Fue un año y ocho meses de ensuciar y obstaculizar las cosas y hubo que llegar a la Corte, para que la Corte dijera finalmente algo que era una pavada y debió decirse en la misma noche del 18 de enero de 2015, que era que en la Causa tenía que intervenir un Juez Federal. En ese año y ocho meses vimos cómo Berni y Fein zapateaban americano arriba de la prueba en el departamento de Le Parc, como aparecía una persona quemada en las inmediaciones del departamento, cómo se buscó la forma imposible de instalar que Nisman no podría haber muerto a través de otra posibilidad de que no sea el suicidio”.
“Encontramos una Justicia en estado terminal, en agonía. Algunos estamos luchando para llevarla a la sala de terapia intensiva, pero hay órganos y miembros gangrenados… y hay que amputar. Esa es una tarea del poder político, no de la Justicia. Lo tiene que asumir la política”.
La muerte de Nisman
“Quién fue el que apretó el gatillo, tal vez no lo sepamos nunca. Sí podemos saber cuáles son los intereses que la denuncia de Nisman tocaba para generar este estado de pavor que llevó a una decisión tan drástica. Para eso es imprescindible que la denuncia de Nisman se abra”.
