El candidato del Frente de Todos obtiene el 47,56% de los votos, se acerca al resultado obtenido en las PASO y echa por tierra el sueño reeleccionista del jefe de Estado, quien repuntó fuerte respecto de las internas de agosto.
Con el 83% de las urnas escrutadas, el candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández, obtiene el 47,59% de los votos frente al 40,99% que consigue Mauricio Macri, y se impone en primera vuelta.
Los primeros resultados ratifican el escenario ultra polarizado de la Argentina en la que la primera vuelta electoral de las Presidenciales ofició como una suerte de balotaje entre dos modelos económicos y sociales antagónicos. El Frente de Todos y Juntos por el Cambio concentraron por sí solos más del 88%de los votos.
El resultado tomó por sorpresa al Frente de Todos que esperaba superar el 50 por ciento con unos 20 puntos de ventaja, mientras que levantó el ánimo en el búnker de Juntos por el Cambio.
Es que respecto de las primarias de agosto, Fernández mantiene casi el mismo porcentaje (había sacado 47,79 por ciento en el recuento definitivo) mientras que Macri creció casi 10 puntos.
A Macri no le alcanzó. No pudo forzar el balotaje que le hubiera dado una nueva vida a su sueño reeleccionista. Sin embargo la estrategia adoptada tras las PASO se reveló en algún punto acertada. Macri logró mantener su núcleo duro, las capas medias y altas de los principales conglomerados urbanos de la Argentina y recuperó provincias en las que había perdido en las PASO.
Mientras el pasado 11 de agosto Juntos por el Cambio apenas se había impuesto en la Ciudad de Buenos Aires y Córdoba, este domingo Macri logró teñir de amarillo también las provincias de Mendoza, San Luis, Santa Fe y Entre Ríos.
