Los familiares se acercaron este viernes a recibir un nuevo parte oficial de la Armada Argentina en la Base Naval de Mar del Plata. Leyeron una oración en el acceso principal al predio, cortaron la calle y pidieron el apoyo de la comunidad para que, a casi dos meses de la desaparición del ARA San Juan, no se olvide a los 44 tripulantes y se intensifique la búsqueda.
Faltan 15 minutos para la hora de la convocatoria y la puerta de la Base Naval de Mar del Plata está vacía. Los familiares reciben dentro del edificio militar un nuevo parte de la Armada, los que últimamente no varían demasiado. Cuatro adolescentes pasan caminando por el lado de afuera del complejo, bordeando la alambrada en la que hay colgadas cada vez más banderas, rosarios, vírgenes, carteles y muestras de apoyo. Uno de ellos toca una estampita y se persigna. Vuelve a hacerlo al pasar por la puerta principal, como si se tratara de un santuario.
A las 11:15 se ve a los familiares acercarse a la puerta del predio, caminan despacio, acompañados del cura de la Base Naval. Traen con ellos carteles, remeras y banderas argentinas. Al llegar a la barrera de acceso se detienen unos segundos para que la prensa les tome una foto juntos e inmediatamente después forman una ronda. Frente al puesto de guardia el sacerdote se prepara para leer una oración pidiéndole a Stella Maris, “la Virgen marinera”, un milagro. “Les pedimos a los medios que por favor no nos abandonen”, no se contiene y grita Cristian, el cuñado de Celso Oscar Vallejos, uno de los 44 tripulantes, antes de que el religioso empiece a hablar.
Unos minutos más tarde, Cristian, cuñado de Vallejos, suboficial segundo y sonarista del submarino, habló con Infobae y manifestó que a casi dos meses de la desaparición la sensación es que “no se está escuchando a las familias”. “Lo único que tenemos es el parte diario; la Armada creo que hasta donde puede está cumpliendo bien su labor”, manifestó. “Estamos haciendo fuerza en un estado de emergencia masivo, para que salgan la mayor cantidad de buques a buscarlos”, expresó, antes de agregar: “Cada bocanada de aire que damos acá afuera a ellos abajo les está haciendo falta”. Muchos de los familiares todavía los esperan con vida.
“Necesitamos que la búsqueda sea de más intensidad”, reclamó, antes de precisar sobre la situación de todas las familias que siguen de cerca cada noticia y cada nuevo dato de los operativos de búsqueda. “Las sensaciones son duras para cada uno de nosotros, toda la gente que vos ves acá no come, no respira, busca apoyarse la una a la otra y abrazarse a la fe”, dijo. Cuando terminaba el intercambio, el resto de los allegados empezaban a cortarel Bulevar Marítimo Patricio Peralta Ramos.
La calle fue cortada una media hora en sentido al centro de Mar del Plata y, al contrario a lo que pudiera esperarse, los conductores de los autos que en ese momento quedaron atascados a la altura de la base militar, en lugar de impacientarse, se detuvieron y esperaron en silencio. Al destrabarse la circulación pasaron tocando las bocinas en muestra de apoyo y aplaudiendo desde el interior de los coches a los familiares, lo que provocó la emoción de los que se manifestaban. Un colectivero local inclusive desplegó una bandera argentina en su unidad con el número 44.
Para el lunes, cuando se cumplan dos meses desde el 15 de noviembre en que el ARA San Juan entabló su última comunicación radial con la Base Naval Mar del Plata, las familias convocaron “al pueblo argentino” a la puerta de la dependencia militar a las 19:00 para “acompañar” y “solicitar que se intensifique la búsqueda”.
Infobae
