En principio debían ser 45 los tripulantes del submarino ARA San Juan, que realizarían el recorrido desde Ushuaia hasta Mar del Plata. Sin embargo, uno de ellos no zarpó en una decisión tomada a último momento.
Se trata del cabo principal Humberto René Vilte, quien es jujeño pero reside con su familia en Mar del Plata.
Solo a horas de subirse al ARA San Juan, submarino que aún no se ha encontrado luego de 9 días desaparecido, “Beto” pidió excusarse de la misión debido a que su madre había tenido un problema de salud.
De esta manera, la Armada le concedió el permiso e incluso le pagó el traslado a su provincia natal. Horas después el San Juan desapareció y es intensamente buscado por diferentes fuerzas internacionales.