Según los datos del Indicador Barrial de Salud Nutricional, el 48 % de los niños y niñas de entre 0 y 2 años evaluados en talla y peso en los barrios humildes del Distrito de La Matanza están malnutridos: esto implica bajo peso (14%), riesgo de bajo peso (12%), sobrepeso (18%) u obesidad (4%). En tanto, desde los 6 hasta los 19 años, los chicos, chicas y adolescentes, sufren en particular la obesidad, llegando al 17 por ciento de la población estudiada.
De acuerdo a los datos preliminares y sistematizados de este informe, se pesó y midió a 1225 niños, niñas y adolescentes de 0 a 19 años en 47 merenderos que el Movimiento Barrios de Pie coordina en diferentes barrios de las localidades de Laferrere, González Catán, Virrey del Pino, Rafael Castillo, Isidro Casanova, Villa Celina, Madero, Ciudad Evita y San Justo.
La desnutrición proteico-energética, sobre todo en los primeros meses de vida, provoca la pérdida de peso corporal y esto acarrea un deterioro de la salud -disminuye la capacidad inmunológica del organismo, facilitando la aparición de infecciones que impiden la absorción de los nutrientes-; la merma de la capacidad intelectual y de aprendizaje; y retrasos en el crecimiento.
Los números marcan que mientras el bajo peso y riesgo de bajo peso tiende a bajar a partir de los 6 años; hay un marcado incremento de la obesidad en los niños y niñas mayores de 6: llega al 17% entre los 6 y 12 años, y al 16% en los adolescentes de 12 a 19.
Al analizar el resultado del estudio presentado, Jorge Ceballos, secretario general del Movimiento Libres del Sur en la Provincia de Buenos Aires dentro del Frente Amplio UNEN, señaló: “Estos indicadores nos demuestran que después de la supuesta década ganada, la realidad de los sectores más humildes sigue postergada. El ingreso por la Asignación Universal por Hijo ha quedado licuado por el efecto de la inflación”.
“Cuando hablamos con mujeres que tienen a su cargo la alimentación de los niños, nos dicen que el monto de la Asignación les alcanza, con suerte, para dos semanas. Esto lleva a que opten obligadamente a incorporar alimentos de menor calidad, ricos en carbohidratos y que no proveen los nutrientes necesarios, lo que ayuda al sobrepeso de sus hijos”, añadió.
